El presidente keniano, Uhuru Kenyatta, anunció el martes en la noche el fin del asalto al centro comercial Westgate de Nairobi, ocupado desde el sábado por un comando islamista armado, que dejó un saldo de 67 muertos.
Después de tres días de cerco, «hemos humillado y vencido a nuestros asaltantes», declaró el presidente en un discurso televisado, precisando que en el ataque murieron 61 civiles y seis miembros de las fuerzas de seguridad.
Este balance es provisional, ya que «durante la operación se derrumbaron tres pisos del Westgate y hay aún cuerpos atrapados, incluidos los de los terroristas, bajo los escombros».
«Cinco terroristas murieron por balas y 11 sospechosos fueron detenidos», añadió.
«Esos cobardes se enfrentarán a la justicia, así como sus cómplices y sus jefes, donde quiera que se encuentren», dijo.
«Los expertos forenses están trabajando en la identificación de la nacionalidad de los terroristas», aseguró.
Tras anunciar que el cerco al centro comercial había terminado, el presidente keniano dijo que las pérdidas para el país por el ataque del grupo islamista somalí shebab son «inmensas».
Kenyatta declaró tres días de duelo nacional a partir del miércoles.
AFP