Tiempos de mucho dinamismo esperan al equipo de Greivis Vásquez en la NBA. Y para impulsar las novedades llega Shaquille O’Neal, quien se estrenó en conferencia de prensa como copropietario de la divisa que hace vida en la ciudad de Sacramento. Y que ahora, por vía del personaje, pone su hombre en la web como “Shaqramento”, no alejado del ensayo aprobado por la liga para aceptar apodos donde se acostumbra poner los nombres de los jugadores.
Al presentarse ante 75 comunicadores, con las cámaras de TV chocándose en la búsqueda de mejores posiciones, el ex centro que durante al menos una década dominó la NBA como pocos lo han logrado, “se robó el show”, como suele hacerlo por su natural dicharachero y carismático. Y aseguró que, así como antes machacó a los Kings en la cancha, ahora está dispuesto a contribuir al avance de una divisa con muchos jugadores jóvenes, de interesante futuro a mediano plazo.
Los Kings tienen, por cierto, a uno de los mejores candidatos para reeditar las hazañas de Shaq, el centro DeMarcus Cousins (23 años, 2 metros 11 y 122 kilos, 2 temporadas y promedios de 16.3 puntos y 9.8 rebotes). Quiere ser lo que Phil Jackson fue para él, es decir el mentor capaz de orientarle porque, según lo ve, tiene mucho talento pero pretende hacer las cosas a su manera. Y claro que, en materia de actitud y baloncesto, tiene mucho que aportarle.
A decir de fuentes cercanas al equipo, Cousins y los Kings están a punto de cerrar un contrato por 80 millones de dólares, en confirmación de que el equipo será organizado alrededor suyo. Y hay mucho material joven (Greivis, Cal Landry, Marcus Thornton, entre otros), que será dirigido por Michael Malone y aspira convertirse en referencia, en camino a fortalecer la organización al punto de construir el primer coliseo cubierto y al aire libre de la NBA.
A ver cuánto puede pesar la influencia de Shaq.
Armando Naranjo/ donarmandonaranjo@gmail.com/ @DonArmandoN