La Comisión Nacional de Telecomunicaciones de Venezuela (Conatel) abrió el primer expediente administrativo al canal privado Globovisión desde que cambió de dueños, en mayo pasado, por transmitir imágenes que «podrían generar zozobra», informó hoy el director general del ente, Pedro Maldonado.
Maldonado indicó en rueda de prensa que el canal difundió el domingo un programa con «elementos que podrían generar zozobra en la ciudadanía al dar cobertura sobre la supuesta escasez de vehículos y productos alimenticios a nivel nacional».
Estas imágenes que presuntamente violarían el artículo 29 de la Ley de Responsabilidad Social en Radio y Televisión fueron emitidas dentro del espacio «Caso de Investigación» el domingo.
«Se hizo una revisión minuciosa del programa que se trasmitió este domingo y notamos que algunos elementos violan el artículo 29 de la Ley», indicó Maldonado.
Informó que, de momento, Conatel no ordenará cancelar el programa, aunque recordó que este tipo de infracciones pueden ser sancionadas con una multa que puede alcanzar «hasta el 10 % de los ingresos brutos declarados en el ejercicio fiscal anterior» por el canal.
Globovisión confirmó a través de su página web que el documento fue entregado este mediodía, aunque no ofreció mayores detalles.
El pasado fin de semana, el presidente venezolano, Nicolás Maduro, pidió a las Fiscalía que se castigase a los medios de comunicación que ejercen la «guerra psicológica (…) contra la seguridad alimentaria del pueblo».
Globovisión, de línea crítica con el Gobierno en los últimos años, ha sido objeto de varios expedientes administrativos hasta un total de once con el de hoy.
Uno de ellos, en 2011, supuso una multa de 2,1 millones de dólares -el 7,5 % de sus ingresos brutos durante 2010- tras ser acusado por Conatel de apología del delito en la cobertura en junio de ese año de una crisis carcelaria en un penal en las cercanías de Caracas.
En mayo, la anterior directiva, encabezada por Guillermo Zuloaga, decidió vender el canal ante la «inviabilidad económica y política» del medio, y el nuevo grupo propietario impuso una línea editorial alejada del tono que venía siguiendo.
Varios de sus programas más representativos han dejado de emitirse en los últimos meses y periodistas emblemáticos dejaron el canal arguyendo supuestas presiones y disconformidad con el cambio de rumbo del canal, hacia un contenido menos beligerante con el Gobierno.
La nueva directiva de Globovisión ha reiterado que quiere que el canal deje de ser una tribuna opositora para convertirse en una tribuna informativa.
EFE