A oscuras permanecen alrededor de 100 comercios que hacen vida en la calle Federación Baloa de la Redoma de Petare, donde sus dueños generaron las primeras denuncias por la falla del sistema eléctrico, que registró desde el pasado jueves, trayendo como consecuencias pérdidas en sus electrodomésticos y ventas
Desesperados por el fallo servicio de luz eléctrica que padecen desde pasado jueves y la demora en ser restablecido, los dueños de establecimientos comerciales que hacen vida en la calle Federación Baloa de la Redoma de Petare, municipio Sucre, se mantienen en busca de nuevos recursos para recuperar los artefactos eléctricos que se les quemaron y en algunos casos la materia prima que pretendían comercializar.
Más de 350 mil bolívares han sido las pérdidas en las carnicerías en menos de cinco días. Felipe Nevado, encargado del establecimiento “Rincón de Pablo”, dijo que amanecieron dañadas tres reses con los que se comercializan un poco más de dos mil kilos de carne; también las charcuterías que se colocan en el mismo mostrador para estar refrigeradas, quedaron dañadas producto del extendido apagón.
Pérdidas millonarias
Y es que durante un recorrido que realizó el equipo reporteril del Diario La Voz, específicamente por los comercios donde se expenden productos que requieran de una refrigeración, se observó el malestar de la pérdida. Señalaron que tras comunicarse con Corpoelec, conocieron que la causa de la falla es la presunta avería de un transformador.
“Nosotros no tenemos que pagar los platos rotos de una empresa que no se ha dignado a comprar un supuesto repuesto del transformador dañado. Es injusto”, se quejó Nevado.
En el caso particular del comerciante Pablo Torres, quien es propietario de una charcutería, indicó que sus mermas son en ventas, asegurando que cuando se va la luz disminuyen en un 25 a 30%.
Todo una calamidad
“Yo tengo freezer y algunas cavas en un depósito y cuando se va la luz guardo todos los alimentos para que se conserven, pero lo que no puedo evitar es dejar de vender algo rebanado porque no puede encender la máquina, el peso es digital y se me dificulta la venta”, explicó.
Aunque los comerciantes más afectados, destaca Torres, son los charcuteros, carniceros y panaderos, debido a que sus productos deben contar con una refrigeración adecuada, algunos optan por comprar bolsas de hielo para garantizar calidad en sus alimentos, pero esta genera un gasto imprevisto que, por ende, se debe reflejar en los productos.
“Este es el Gobierno de los apagones, del desabastecimiento de la comida, de la inseguridad, aquí nada funciona y todo está podrido pasando por los organismos gubernamentales, en donde todo es corrupción y burocracia”, manifestó Lucía Beltrán, otra comerciante, quien expresó que para convertir al Estado y al país en una potencia, “primero debemos salir del retraso de los servicios públicos”.
Ambiente de caos
e inseguridad
Según los dueños de establecimientos comerciales que hacen vida en la calle Federación Baloa de la Redoma de Petare, municipio Sucre, la falla del servicio eléctrico ha creado un ambiente de inseguridad y caos, perjudicando por completo sus ventas.
”Tenemos que bajar las santamarias a las 5:00 de la tarde, porque los delincuentes se aprovechan de la oscuridad para robar fácilmente, además de perder gran parte de sus artefactos eléctricos, lo poco que vendemos, hasta esta hora, son productos empaquetados que no dependen de una temperatura para sus conservación”.
Así lo relató el comerciante Víctor Marques, quien exigió que sea restablecido el servicio lo más pronto posible, “las calles son actualmente una cueva de lobos, nos encontramos detenidos en nuestros comercios con un miedo terrible a convertirnos en presas fáciles de los delincuentes, y ninguna cuadrilla de Corpoelec nos informa de nada”.
Mairy Chourio / mchourio@diariolavoz.net / @mairychourio
