Para quienes no tiene más opción que enfrentarse diariamente al caos vehicular que se genera en las principales avenidas y autopistas de la capital, ésta no es una sorpresa. El tráfico ya es parte de la cotidianidad del caraqueño, sin embargo, esto afecta directamente su calidad de vida. Para el ingeniero Kenic Navarro, esta realidad es sinónimo de una mala planificación vial de la ciudad
Carlos Aponte vive en el Municipio El Hatillo, para llegar a su trabajo a las 9:00 am, ubicado en Plaza Venezuela del Municipio Libertador -18 kilómetros- debe emprender su camino con un tiempo anticipado de una hora y media, en incluso dos, para prever alguna eventualidad. Como este trayecto es parte de su cotidianidad, no le sorprende el congestionamiento vehicular al que se enfrentará al llegar a la autopista Prados del Este.
De regreso probablemente sea lo mismo, a las 5:00 pm es hora pico, y por tanto la vía estará colapsada en el sentido al que se dirige, pues como él, muchos retornan a sus hogares, sin contar que las instituciones educativas están terminando las actividades del día. “Esto es un estacionamiento”, se queja, pero no le queda más que respirar e intentar relajarse.
Igual que Aponte, en promedio, un caraqueño que vive en los alrededores de la ciudad, puede durar diariamente dos o tres horas de cola –sin discriminar vehículos particulares o transporte público- que se trasforman en 15 horas semanales, 60 al mes y finalmente 720 horas al año, es decir, 30 días o un mes.
Y es que, para trasladarse dentro de la ciudad, una persona usa el mismo tiempo que tardaría en dirigirse a los estados cercanos. Por ejemplo, desde el terminal de La Bandera a Maracay, estado Aragua -105 kilómetros- llegaría en una hora y media; mientras que a Valencia, estado Carabobo –unos 172 kilómetros- tardaría tres horas.
Mala planificación
Kenic Navarro, presidente del Fondo de Prevención Social del Colegio de Ingenieros de Venezuela, explicó que esta situación es sinónimo de la mala planificación con la que ha ido evolucionado la estructura de Caracas y los pocos avances en construcción, extensión y mantenimiento de vías principales.
“Caracas es un valle, cuyo desarrollo longitudinal es Este-Oeste, adolece de vialidad de orden principales en sentido Norte-Sur. Por tanto, todos los obstáculos que se encuentren en las vías que atraviesan a la ciudad desde Petare hasta Catia, generaran fuerte congestionamiento hasta en las zonas que no estén directamente conectadas. No es sencillo”, describió el ingeniero.
Criticó que no existen planes de contingencia o vías de escape a las cuales acudir cuando se genere una eventualidad. Tal es el caso de la afectación en la Av. Francisco de Miranda a la altura de Chacao, que mantiene congestionado el tránsito en la zona desde hace más de tres semanas. Esta misma situación se repite con la reparación del elevado de Maripérez, Av. Libertador, por trabajos de reparación.
“Fuerte cola”
Por otro lado, Navarro explicó que la fuerte cola que se ha experimentando en los últimos días, tienen como causa tres factores principales
1. La reparación del colapso en la vialidad de la Francisco de Miranda, frente al Centro Plaza, al igual que el mantenimiento que se hace del elevado de Maripérez. En ambas casos no hay vías o planes alternas, lo que agrava aún más la situación
2. La incorporación de numerosos automóviles de uso escolar -tanto transporte como carros particulares-
3. El flujo vehicular de carga pesada. En este último punto, Navarro señaló que es necesaria la construcción de nuevas arterias viales para el desplazamiento de estos automóviles sin la necesidad de cruzar por capital, sino bordeándola. Además, también resaltó que es preciso y “de suma relevancia” que las autoridades de tránsito ejerzan sus funciones y velen por el cumplimento de las leyes de en las vías.
En cifras
Según un reciente estudio Kenic Navarro y Víctor Barrios, ingenieros de la secretaria gremial de Primero Justicia, en los últimos 20 años, no se ha construido una sola arteria vial en Caracas, mientras el parque automotor sigue creciendo.
* De cada 100 carros 90 son de uso particular, sumado a que la capital tiene un incremento de hasta 40 mil vehículos anuales, lo que representan el 50% de todos los autos que se ingresan en el país, pero son pocos los que salen de circulación.
Realidad que no se compensa con la capacidad de las vías en relación de la gran cantidad de carros en funcionamiento, existe un vehículo por cada 1.5 personas, cuando el promedio latinoamericano es de al menos tres personas por auto.
En cuanto al transporte público, sólo el 20% del parque automotor son destinadas a este fin, con el agravante de que en su mayoría son unidades en mal estado.
Plantean soluciones
El pasado mes de septiembre, el ministro para Transporte Terrestre, Haiman El Troudi, anunció la futura ejecución de obras de vialidad, con el fin de “mejorar y hacer más fluida la movilidad vial en Caracas”.
Comunicó que se planea proyectar el desplazamiento en dos anillos de circulación concéntricos: uno que permita la movilidad dentro del Área metropolitana y un anillo externo que facilite el desahogo del transporte pesado.
También, destacó que ya se están ejecutando las labores de prolongación de la avenida Boyacá, desde el distribuidor Baralt hasta Catia, y prometió la construcción de 17 terminales suburbanos y cinco terminales urbanos.
Anabel Barrios Díaz e-mail: abarrios@diariolavoz.net