Litros y litros del vital líquido fluyen de la calle 10 de esta urbanización perteneciente a el municipio Sucre, mientras sectores cercanos reciben el servicio de forma intermitente. Comunidad teme que terreno del Club de Abuelos –ubicado al lado de la falla- este socavando por esta situación,
Desde una pequeña jardinera ubicada al lado de Abuelandia, como es conocido el club de abuelos ubicados en la calle 10 de Palo Verde, municipio Sucre, fluyen litros y litros de agua potable, producto de la rotura de una tubería matriz que se registró hace unos dos meses, pero que hasta el momento no ha sido reparada.
La fuerza del líquido, ha producido una gran hendidura en la tierra y varias fisuras en la acera, por lo que la comunidad teme que el terreno sobre el que se encuentra el edificio para las personas de la tercera edad haya comenzado a socavar, poniendo en peligro la estructura y la integridad física de quienes allí hace vida a diario.
Euridice Guerra, dirigente vecinal y miembro de la asociación civil Palo Verde Activo, explicó que el conducto averiado pertenece al tramo del alimentador norte, por lo tanto, surte a la primera y segura etapa de esta urbanización mirandina, las cuales han registrado problemas con el servicio.
“Tantas comunidades, sobretodo zonas populares con días sin recibir agua de forma directa a sus hogares, mientras que aquí se desperdicia. Nos preocupa de sobremanera que las autoridades no hagan nada al respeto, luego de que hemos denunciado reiteradamente esta falla”, se quejó.
Acumulación de fallas
Pero esta situación no se queda aquí. La avería, forma parte de una serie de problemas que se han ido acumulando en la zona, que además están relacionados entre si.
Hace tres meses, un cráter se unos cuatro metros de profundidad se formó en la entrada de la calle 10, el cual ha ido aumentando su densidad producto de torrente provenirte de la tubería rota, convirtiéndose en una especie de pozo con sedimentación, por lo que vecinos creen que también ha incrementado su tamaño.
Realidad que se repite con el “sumidero” que se encuentra justo al frente de la iglesia de la localidad, el cual desde hace siete meses emana agua del asfalto, y ha empeorando tras la fisura del conducto de aguas blancas, que podría pueda estar perjudicando los cimientos del templo, según la vocera vecinal.
Exigen soluciones
Trabajadores y beneficiados del club de abuelos, feligreses y habitantes del sector, exhortaron al Instituto Autónomo de Aguas (IMAS), así como a la Dirección de Obras, Mantenimiento y Servicio de la jurisdicción, entes encargados de realizar las reparaciones, a que se aboquen a solucionar esta situación que aqueja a toda la comunidad y afecta a sectores vecinos.
“Este no es un hecho oculto, el mismo alcalde Carlos Ocariz lo sabe, porque hace unos días hizo un recorrido por aquí y se le informó lo que estaba sucediendo. Es grave y delicado, no puede ser que tengamos que reportar más de ocho veces los problemas para que se dignen a resolver, estos desastres que nos perjudican a todos”, concluyó Guerra.
Alcaldía se compromete
El pasado martes, Cesar Díaz, jefe de desarrollo urbano de la Dirección de Obras, Mantenimiento y Servicio del municipio Sucre, realizó una inspección al cráter y al sumidero en el asfalto que se encuentran frente a la Iglesia San Rafael Arcángel, ubicada en la calle 10 de Palo Verde y se comprometió a que en los próximos días iniciarían los trabajos de reparación. Sin embargo, el IMAS aún no ofrece respuesta a los vecinos en cuanto la reparación de la avería en la tubería.
Otro problema: Inseguridad
En las áreas verdes que se encuentra al lado del Club de abuelos de Palo Verde, desde hace unos dos años permanece abandonado un remolque de unos tres metros cuadrados.
En su interior, se encuentra un colchón y basura, evidencia de que es utilizado por indigentes para pasar la noche. Un trabajador de la zona, relató que hace poco una joven fue ultrajada en el lugar, por lo que la comunidad exige a las autoridades que se deshagan del vehículo, garantizándoles seguridad.
Por su parte, Dioselina Longa, coordinadora del centro para personas de la tercera edad, comentó que en menos de dos meses, delincuentes han ingresado en horas de la noche a la institución, llevándose equipos electrónicos y otros bienes. Piden mayor vigilancia policial.
Anabel Barrios Díaz ///// abarrios@diariolavoz.net