El periodista José Vicente Rangel informó en su programa José Vicente Hoy, transmitido este domingo, que recientemente se produjo una reunión en Perú de «dos destacados dirigentes de la oposición» venezolana, con dos fiscales de Estados Unidos y varios cubanos residentes en el país norteamericano, a fin de coordinar con empresarios y comerciantes el plan denominado Colapso Total contra el Gobierno Nacional.
Señaló que un dirigente opositor venezolano que vive en Perú patrocinó el encuentro. Este plan, que ha sido denunciado por el Ejecutivo, busca acentuar al máximo el desabastecimiento en el país para crear descontento y aprovechar el escenario electoral de diciembre, destacó el experimentado comunicador social y político.
Añadió que los opositores tienen planificada otra reunión en la ciudad de Bogotá, Colombia, para discutir planes violentos en Venezuela. En ella, señaló Rangel, se prevé la presencia de ex gerentes de Petróleos de Venezuela (Pdvsa) y de personas que representan al ex presidente neogranadino Álvaro Uribe, como Sebastián Pinzón y Camilo Conde, quienes son «los encargados de adelantar gestiones de participación con grupos paramilitares en la zona fronteriza de La Gabarra y Puerto Santander».
Asimismo, el periodista señaló, en el espacio transmitido por la televisora privada Televén, que se han detectado actividades de mercenarios y paramilitares ubicados en el estado Apure, en los llanos venezolanos. «El rastreo se viene haciendo desde hace semanas», afirmó.
Campaña mediática
Rangel también se refirió a la campaña «abiertamente desestabilizadora» promovida por medios de comunicación privados.
Dijo que en Venezuela nadie está interesado en cercenar la libertad de expresión sino que, al contrario, el interés es fortalecerla, «pero la manipulación de información, trabajar mediáticamente para distorsionar la imagen del país y enfatizar aspectos negativos, no es que sea delito, pero sí es una inaceptable perversión cuando se convierte en práctica cotidiana y coloca en grave riesgo a las instituciones del país», puntualizó.
Recordó que esa política de las empresas privadas de comunicación, convertidos en voceros de la subversión, condujo hace 40 años a la destrucción de la democracia chilena, con el golpe de Estado contra Salvador Allende, y a la entronización de una dictadura que se extendió durante 17 años. También fue lo que provocó el golpe de abril 2002 contra el líder de la Revolución Bolivariana, Hugo Chávez.
«Libertad de expresión plena, pero responsable. De lo contrario, estaremos cavando la tumba de la democracia», advirtió.
También rechazó los intentos de la oposición de banalizar las denuncias sobre hechos que afectan el funcionamiento democrático del país, y señaló que con esto la derecha busca evitar explicaciones y un debate serio sobre los señalamientos.
AVN