Este miércoles, el diputado a la Asamblea Nacional Ángel Medina, denunció que la Bancada de Gobierno se ha propuesto como estrategia destrucción de forma organizada la función legislativa, contralora y fiscalizadora les otorga la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela como parlamentarios.
Medina aseguró que el Poder Legislativo Nacional ha pasado de ser una institución independiente y legitima, a jugar el triste papel de ser mandadero del Ejecutivo para amedrentar a quienes piensan distinto, a su juicio, la función que más se ha cumplido es de ser la caja chica del gobierno que aprueba recursos sin cuestionamiento alguno.
«Todo parlamento debe ser digno garante de la democracia y su fortalecimiento, para ello, debe fortalecer sus competencias legislativas, promoviendo leyes que beneficien al Pueblo, su potestad de control observando las actuaciones del resto de los poderes y vigilando el correcto manejo de los recursos, así como afianzando su capacidad de investigación de todos aquellos casos o eventos que repercutan en la dinámica política, económica y social de la nación. Lamentablemente esta Asamblea Nacional ha sido objetivo del más feroz ataque por parte de la bancada gobiernera, que ha puesto de rodillas a nuestro Poder Legislativo, lo ha transformado en fiel servidor de las apetencias de quienes hoy tienen el poder, olvidándose desde hace rato de los ciudadanos y sus necesidades», aseveró
Asimismo, el asambleísta por Acción Democrática, aseguró que la Ley Habilitante, el allanamiento de inmunidad de parlamentarios, la compra de conciencia, las sanciones contra Borges y Bracho, las propuestas de discusiones de asuntos estériles y la negativa a debatir los grandes problemas del país, son muestra fehaciente que el camino que se han trazado no es otro que destruir la confianza del Parlamento como centro del debate Nacional, pues «de ser un apéndice del Ejecutivo y garante de un proyecto de poder sectario, que está divorciado de la realidad del país. Esta AN está siendo convertida de forma peligrosa en el organismo represivo del gobierno».