La inmediatez con que se trasmite actualmente la información, le otorga mayor fuerza. Esa capacidad de informar al instante era, hasta hace poco, el gran poder de la radio, que no requería imágenes ni equipos sofisticados para difundir las noticias en el momento en que se produjeran
Noel Álvarez * // Twitter: @alvareznv
Por más que intenten esconder la verdad, distorsionarla, amedrentar, no podrán lograrlo. Nuevos tiempos, novedosas formas de comunicación, como lo son las redes sociales terminan imponiéndose ante la hegemonía comunicacional del gobierno, ante las reiteradas amenazas de castigar a los que se expresan en los medios.
Negar la realidad es una pésima estrategia, simple y llanamente porque ya hoy no se puede. La existencia de Internet y de millones de personas que poseen un celular que les permite expresarse instantáneamente, da al traste con el deseo de ocultar lo que todo el mundo ve.
En Venezuela se estima que más de 12 millones de personas están conectadas a Internet y la telefonía móvil estaría por el orden de los 29 millones de suscriptores. Ante estas cifras, es risible pretender ocultar lo que pasa.
Como hemos dicho, la gente comenta, analiza. No entender las nuevas formas de comunicación, es estar peligrosamente a espaldas de la realidad. Cada ciudadano con un celular, que posea una cuenta en Facebook o en Twitter, se convierte en fuente de información, ejerciendo su poder de expresarse, de denunciar, alertar, informar lo que sucede.
La inmediatez con que se trasmite actualmente la información, le otorga mayor fuerza. Esa capacidad de informar al instante era, hasta hace poco, el gran poder de la radio, que no requería imágenes ni equipos sofisticados para difundir las noticias en el momento en que se produjeran. Hoy, las redes sociales, cumplen ese papel, permiten al ciudadano no solo comunicar, sino además preguntar, denunciar, debatir con los que ejercen el poder, que en democracia está sustentado y depende de los ciudadanos.
Son ellos los que eligen a sus gobernantes, los que pueden ejercer contraloría aprobando o reprobando la gestión, los que en un momento dado pueden cambiar el rumbo del país, los que pueden hoy, apoyar a un líder y luego, abandonarlo, si se equivoca o desvía el rumbo.
Poder interactuar con los gobernantes, con los medios de comunicación, gremios, organizaciones de todo tipo, dirigentes, marcas, productos, es, quizás, lo más relevante de las redes sociales, beneficiando a la gente porque pueden ser escuchados, tomados en cuenta.
Las redes dan para todo, para el encuentro de amistades, intercambio de opiniones, divulgar noticias, incluso, para propagar falsos rumores, pero quien lo hace, sabe que el costo es alto, porque el que usa Twitter o Facebook tiene amigos o seguidores de acuerdo a su reputación que puede ser muy alta, si los contenidos despiertan interés y hay respeto hacia los demás, pero puede perderse en un instante si divulga algo falso.
El poder de las redes sociales otorga al ciudadano un rol protagónico.
*Coordinador Nacional de “Gente” Generación Independiente
