Los sicarios colombianos que fueron capturados por las autoridades de inteligencia venezolanas y que tenían como objetivo perpetrar un plan de magnicidio contra el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, cobraron unos 20 millones de pesos colombianos (10.600 dólares), informó este lunes el ministro para las Relaciones Interiores, Justicia y Paz, Miguel Rodríguez Torres.
Durante la transmisión del programa A Toda Vida Radio, el ministro Rodríguez Torres dijo que visitó Colombia para intercambiar datos con el cuerpo de inteligencia neogranadino sobre el caso de magnicidio contra el presidente Maduro.
El pasado 26 de agosto el ministro Rodríguez Torres anunció la captura de dos ciudadanos colombianos implicados en planes de magnicidio contra el mandatario nacional, que fueron aprehendidos el pasado 15 de agosto en el hotel Guaracarumbo, ubicado en la Carretera Panamericana, estado Miranda.
Rodríguez explicó que la detención de los sujetos se logró luego de que el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) realizara las pesquisas correspondientes al plan denominado Operación Carpeta Amarilla.
El titular del despacho de Relaciones Interiores, Justicia y Paz precisó que los dos sujetos, integrantes de un grupo desestabilizador compuesto por 10 individuos, identificado por la Dirección de Inteligencia de Colombia, responden a los nombres de Víctor Johan Gueche Mosquera, de 22 años de edad, y Erick Leonardo Huertas Ríos, de 18, quienes ingresaron al país el pasado 13 de agosto por San Antonio del Táchira.
Rodríguez Torres comentó que recientemente logró entrevistar en Colombia, gracias a la cooperación de los cuerpos de inteligencia de ambas naciones, a Óscar Alcantara González (alias Gancho Mosco), quien está detenido en en el vecino país desde marzo de 2013 y condenado por uso de menores de edad para comisión de delitos, entre ellos, homicidio, concierto para delinquir y tráfico, fabricación o porte de estupefacientes.
Al respecto, Rodríguez Torres dijo que durante la entrevista pudieron evidenciar varias contradicciones de Gancho Mosco, que es el jefe de los dos sicarios capturados por el Sebin, sobre su relación de negocios con Alejandro Caicedo Alfonso (alias David) quien coordinó la movilización de los sicarios desde el municipio colombiano de Soacha, que se encuentra cerca de Bogotá, hacia Venezuela.
«Alias David es el enlace, en la cárcel, con Óscar Alcantara González», precisó el ministro, quien añadió que Gancho Mosco dijo no conocer a alías David, quién es el que recluta y traslada a los sicarios desde la ciudad de Bogotá hasta Cúcuta».
No obstante -explicó- que «los registros de la cárcel señalan que alias David ha ingresado a visitar a Gancho Mosco, quien según los registros policiales es el jefe del grupo de sicarios. Esto, entonces, nos confirma la información brindada por los cuerpos de investigación colombiana».
El ministro de Interior también informó que durante las entrevistas, las autoridades venezolanas lograron conversar con una mujer que es pareja de uno de los involucrados en el caso, quien confirmó que ambos sicarios se encontraban en Venezuela para realizar el magnicidio.
«Ella nos dijo que ciertamente esos muchachos venían a Venezuela a cometer un homicidio, venían a matar a alguien de alto nivel y gran peso político», detalló el ministro.
AVN