Habitantes de Altos del Dividive, no tienen suministro de agua potable por tuberías y se abastecen a través de camiones cisternas privados. Las familias fueron ubicadas por el Gobierno Nacional en ese urbanismo hace seis años
Desde las 6 a.m. hasta las 10:45 a.m. de ayer, los vecinos de la urbanización Altos del Dividive del municipio Cristóbal Rojas, cerraron el paso de la carretera nacional Cúa-Charallave, frente al restaurante El Grande del Tuy, para exigir la instalación de las redes de aguas blancas y servidas, así como la culminación de la vialidad que quedó a medias.
Las personas denunciaron que desde que las ubicaron en ese urbanismo, hace seis años, han pasado más trabajo que “garrapata en peluche”, pues no cuentan con los servicios básicos indispensables para tener una buena calidad de vida.
Yuneisy Hernández, vocera de los manifestantes, señaló que los habitantes no cuentan con el suministro de agua potable por tuberías y se abastecen a través de camiones cisternas privados.
“Necesitamos que nos ayuden con el suministro de agua potable para las 700 familias que vivimos en las 25 torres, tenemos que comprar el agua en 30 bolívares y muchas personas no podemos costear ese gasto. El proyecto del agua tiene cinco años, vienen empresas y no nos dan respuesta. Estamos cansados de tantas promesas», resaltó la tuyera.
Hernández, explicó que tienen otras problemáticas. “La vialidad está en mal estado, el alumbrado público es deficiente y hay fallas en la recolección de basura”, mencionó.
También resaltó que requieren la construcción de una escuela, “los niños tienen que ir a planteles lejanos para poder estudiar, deben salir por lo menos dos horas antes, pues el transporte público no pasa por el lugar debido al mal estado de las vías. Le hacemos un llamado al presidente Nicolás Maduro para que inspeccione la situación del urbanismo Altos del Dividive”, recalcó.
Hernández denunció que están construyendo otras dos torres y a los habitantes no los ayudan a solventar los problemas con los servicios, “no entendemos como tienen recursos para más edificios y no para darnos solución a nosotros”, dijo.
Los manifestantes aseguran haber acudido al Inavi, al Ministerio de Educación, a servicios públicos de la Alcaldía de Charallave y a Corpomiranda, pero solo les envían “pañitos de agua tibia”.
Apoyo
Residentes de los sectores adyacentes El Milagro de Dios I y II se sumaron a la protesta, en apoyo a sus vecinos y en demanda de mejoras a sus comunidades.
María Esteves, residente del sector Milagro de Dios, indicó “llevamos años solicitando que vengan a canalizar las aguas servidas porque tenemos una laguna de desechos y eso perjudica a los habitantes con enfermedades, queremos respuesta”.
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