La directora del programa de las Américas para el Centro Carter, Jennifer McCoy, alertó hoy de que en los procesos electorales que se han realizado en Venezuela en los últimos años ha surgido el «ventajismo» como un factor de denuncia por el uso de los recursos públicos por parte del oficialismo.
McCoy comentó que a partir de los años 2005 y 2006, el Consejo Nacional Electoral de Venezuela (CNE) inició una etapa de consultas con los partidos políticos y hubo más participación en las auditorías del sistema, lo que generó una mayor confianza por parte de la opinión pública en el mecanismo automatizado de sufragio.
Sin embargo, «en los años más recientes (…) ha surgido el tema del ventajismo», dijo la representante de la organización estadounidense al referirse a las denuncias que hizo la oposición en los últimos sufragios sobre el uso de recursos públicos, incluyendo a medios de comunicación del Estado, en las campañas oficialistas.
«Hemos visto que la confianza en Venezuela (en el sistema electoral) tiene muchas subidas y bajadas», dijo McCoy durante una videoconferencia que ofreció en el marco del Congreso Internacional Buenas Prácticas Electorales para el Fortalecimiento de la Democracia, que se realizó en la Universidad Católica Andrés Bello de Venezuela (UCAB).
Ya en julio pasado el Centro Carter emitió un informe preliminar sobre las elecciones presidenciales de abril de este año en el que recomendó garantizar en el futuro una mayor equidad en las campañas y aclarar las normas que regulan la participación de los funcionarios y servidores públicos en ellas.
El informe encontró «una serie de inequidades en las condiciones de la campaña, tanto en lo que hace al acceso a recursos financieros como al acceso a los medios de comunicación», señaló entonces la organización fundada por el expresidente de EE.UU. Jimmy Carter.
La oposición venezolana ha criticado reiteradamente la utilización discrecional de fondos públicos en la financiación de campañas por parte del oficialismo.
McCoy también recordó hoy al hacer referencia al tema electoral en América Latina que «más allá de asegurar las condiciones de competencia equitativa, es importante que en las campañas proselitistas los votantes tengan información sustantiva sobre las propuestas de los diferentes candidatos».
No obstante comentó que en los últimos años se ha observado «una creciente tendencia a sustituir el debate de ideas por la llamada campaña negativa, y los ataques personales dirigidos a desacreditar a los candidatos opositores», en la región.
También comentó acerca del trabajo de «observación» internacional que ha realizado la institución y recordó que esta figura tiene como objetivos aumentar la confianza en el sistema electoral cuando éste es cuestionado e informar sobre el proceso de sufragio a la comunidad internacional.
Indicó que en las elecciones de Estados Unidos no se ha logrado instaurar la figura de la observación porque es un país «completamente descentralizado» y los comicios no son potestad de un ente único que se encargue de invitar a los observadores.
«El Centro Carter ha criticado esto, pensamos que sería mejor si pudiéramos tener observadores internacionales en todos (los estados), pero al mismo tiempo pensamos que más importante son observadores nacionales para cualquier país porque tienen capacidad para tener mucha gente y es un mecanismo de participación para la ciudadanía», dijo.
El Centro Carter optó por no participar como «acompañante» en las elecciones presidenciales del 7 de octubre de 2012 por considerar que se trataba de un concepto más restringido que la observación internacional que prevaleció en Venezuela hasta 2006 y en la que el centro había participado desde 1998.
Sin embargo, aceptó la figura de acompañante para el proceso presidencial de abril de 2013 ante el «importante» momento político que atravesaba el país tras la muerte del gobernante Hugo Chávez (1999-2013).EFE