El ministro de Turismo, Andrés Izarra, anunció hoy que se preparan medidas para llegar a una «solución de fondo» del problema que existe desde hace meses en el país con la subida de los precios de los pasajes aéreos.
«Hay una serie de medidas que se van a anunciar desde el punto de vista de política monetaria y en el marco de la política económica que mas allá de las medidas puntuales que se puedan tomar (…) la solución de fondo pasa por unas nuevas medidas económicas», declaró Izarra a la emisora Unión Radio.
El precio de los pasajes para viajar al exterior se ha incrementado de forma exponencial fomentado por el «turismo cambiario», como se conoce a los que salen del país solo para obtener divisas a precios preferenciales.
En el país rige desde 2003 un estricto control estatal de cambio que impide la libre compraventa de divisas, administradas de manera exclusiva por el Estado, que las vende de manera condicionada, en montos limitados y tras engorrosos trámites.
El objetivo de este «turismo cambiario» es conseguir los dólares que el Estado venezolano concede a una tasa de 6,3 bolívares por unidad a los ciudadanos que viajan al exterior para, una de vez de regreso a Venezuela, poder venderlos a una tasa que, en el ilegal mercado paralelo, es siete u ocho veces superior.
«Tenemos un problema grave producto del tema cambiario y de una serie de personas que están tratando de sacar ventaja de la situación y no están haciendo turismo, están viajando para estafar al Estado», indicó Izarra.
Para luchar contra este problema, el Gobierno ha solicitado el apoyo de Argentina, Ecuador y Perú, y ha implementado en aeropuertos internacionales medidas para chequear a los pasajeros venezolanos que viajan al exterior.
Además, tiene previsto en diciembre comenzar la implantación de máquinas ‘captahuellas’ digitales en las que todo pasajero venezolano tendrá que poner sus manos para poder activar su tarjeta de crédito.
A este problema local hay que sumar las compras de billetes por extranjeros que utilizan Venezuela como base hacia otros destinos.
«Hay un fenómeno de viajeros que vienen del extranjero, cambian dólares en el paralelo y compran otros boletos. Le estamos subsidiando a personas que no viven en Venezuela», señaló hace unas semanas el presidente del instituto de control de precios (Indepabis), Eduardo Samán.EFE