Desde soportar un sol inclemente, el frío de la madrugada, insultos de los policías hasta el estar lidiando con los embates del hampa, las personas han permanecido pacientemente en las afueras de comercios de electrodomésticos, a fin de poder comprar algún artefacto “regulado”
Esperando pacientemente, bajo un sol inclemente, a la intemperie y sin pegar un ojo a fin de poder adquirir al menos dos artefactos eléctricos a precios “regulados”, se han tenido que someter, por unos tres días, cientos de personas en las afueras de los comercios de electrodomésticos mientras la cola avanza lentamente.
Sillas plásticas, cartones y uno que otra cobijas acompañaban a estas personas provenientes de varias zonas de Caracas, quienes desveladas y con el riesgo de no cumplir su cometido, nunca desistieron de abandonar el lugar, pese a los embates del hampa e insultos por parte de algunos funcionarios policiales. “Vengo de los Valles del Tuy comprar mi lavadora de 27 pulgadas que tanto he querido, tuve dos días pernoctando aquí, pero logré comprarla a 5 mil 600 y no cuando anteriormente costaba 28 mil”.
“Sacrificio”
Así lo expresó, Yanklin Cardona compradora, quien mientras retiraba, contenta pero agotada, su artefacto en el comercio Pablo Electrónica, ubicado en La Candelaria, municipio Libertador, criticó la falta de control que no ha puesto en marcha el Gobierno para dar cumplimiento a la ordenanza de forma organizada. Aunque admite que existe un gran diferencia de precio que permite economizar tu bolsillo, señala la cliente, que deben existen otras medidas o estrategias para que el pueblo “no pase tanto trabajo”.
Y es que, a pesar que a primera hora de la mañana estuvo organizado, cuenta Cardona, el descontrol dominó en algunos momentos el área militar de Caracas, pues muchas personas vociferaba queremos comprar. «Aunque estaba ya cerca de la cola la multitud me estaba asfixiado», relató.
Situación diferente a la de Karelis Sulbarán, otra compradora, quien viene de la parroquia Caricuao, y narró que aunque estaba esperando desde el domingo por un número ya se han escuchado que quedan pocos artefactos que no están regulados, “tengo la esperanza de comprar un televisor, perteneceré el tiempo que sea necesario hasta lograr mi compra, pues tengo que aprovechar esta oportunidad”.
Estafa ambulante
Sin embargo, denunció existen caleteros que pretenden cobrar trescientos bolívares por trasladar una mercancía hasta la avenida. “Cómo es posible que una persona que haya comprado una nevera a 11 mil bolívares, tenga que cancelarle este monto al caletero. Es injusto”, se quejó Subarán quien se arrepintió y consideró de “engaño al pueblo” esta estrategia que hizo el Gobierno justo ahora “a fin de ganar votos”.
En esto coincide, Corolina Pérez otra compradora, quien dijo: “Gracias a mi presidente obrero ahora tengo mi neverita de 10 pies, no estoy de acuerdo que existan personas que se aprovechan de esta acción para estafar a los clientes, pues le había pedido tanto a mi Dios que me concediera un milagrito que no pudo obtener antes, por estos precios exorbitantes”.
Sin embargo, destacó que el sacrificio no fue del todo el 100% positivo, ya que después de calarse estas calamidades “sólo compré un aparato eléctrico porque ya no quedaba nada”.
Otros comercios
abarrotados
La aglomeración de gente fue el factor común en este inicio de semana, cuando la multitud se volcó a diversos establecimientos comerciales para comprar electrodomésticos con su respectivo “monto regulado”.
Y es que, en un recorrido realizado por el equipo de prensa del Diario La Voz por algunos comercios (Martell, Electrodoméstico Chacao, Dosay, Sony Chacao) de este mismo rubro ubicado en la Av. Francisco de Miranda, a la altura de Chacao, los compradores se apersonaron, mientras algunas tiendas amanecieron cerradas con carteles pegados que justifican el cierre por ajuste de precios y las que permanecían abiertas cuentan con la presencia de una multitud organizada en largas colas a la espera de poder realizar sus compras.
Entre los artefactos electrodomésticos más buscados se encuentran, televisores, neveras, cocinas y lavadoras.
“Privilegiados”
Según algunos comparadores, existen privilegios para aquellas personas que trabajan para el Gobierno. “Como es posible que funcionarios de alta jerarquía y policías se disfrazan de compradores para adquirir un electrodoméstico”, dijo Tatiana Robana, compradora.
Resaltó que gran parte de la aglomeración que aún permanecen en las afueras de comercio Pablo Electrónica, ubicado en La Candelaria, y lo lento que está el proceso de compra, radica en esta “arbitrariedad”.
çMairy Chourio / Mchourio@diariolavoz.net / @mairychourio