Ya se han presentado varios casos de personas que han resultado afectadas con el alcaloide y además despojadas de sus pertenencias. Los mismos han sido denunciados en el Cicpc de la zona y el área de investigaciones del sistema ferrocarrilero, donde las víctimas han sido entrevistadas
Caramelos con burundanga están vendiendo algunos sujetos dentro de las instalaciones del ferrocarril Ezequiel Zamora, que opera de Caracas a los Valles del Tuy. En lo que va de semana han sido denunciados unos cinco casos de personas que han resultado afectadas con el alcaloide y además despojadas de sus pertenencias.
Dos de los hechos puntuales, que han sido denunciados en el Departamento de Investigaciones del Ife y en el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas de los Valles del Tuy, se han detectado en la estación Ezequiel Zamora de Cúa y la estación Simón Bolívar de La Rinconada en Caracas.
Así lo detalló para la prensa el representante del Departamento de Investigaciones del Instituto Ferrocarrilero del Estado, Ife, Félix Arraiz, quien dijo que, según lo declarado por las víctimas, los usuarios son abordados por los buhoneros, quienes venden caramelos contentivos de una sustancia que hace que el viajero pierda la noción por algunos minutos.
“Las personas quedan como en el aire. Desorbitadas totalmente y es el momento que aprovechan los supuestos vendedores de golosinas, para robar a los usuarios del sistema, a quienes despojan de sus pertenencias y desaparecen”, dijo el funcionario, quien detalló que luego la víctima recupera su estado normal y es cuando se percata que fue robada.
En tal sentido, el funcionario alertó a los usuarios a no comprar ni aceptar ningún tipo de golosinas dentro del sistema ferroviario, “ya que creemos que los sujetos que están utilizando este modus operandi ¨marcan¨ a su potencial víctima, la envuelven con la venta del caramelo y después la siguen para posteriormente robarla”.
Falta de conciencia
Como falta de conciencia, por parte de los usuarios, calificó Félix Arraiz, la compra de golosinas por parte de los viajeros, quienes a pesar de la campaña publicitaria que ha desplegado el IFE siguen comprando caramelos a los buhoneros.
“Pedimos que los usuarios se abstengan de comprar golosinas a los informales dentro del ferrocarril y más en la época decembrina, ya que muchos facinerosos se aprovechan para cometer sus delitos”, dijo.
Resaltó que el IFE ha tomado diversas acciones para evitar que los buhoneros ingresen a los vagones, “pero como los usuarios les compran la situación ha sido difícil”.
También reveló que los informales han violentado algunas puertas de los coches para esconderse entre carro y carro.
MIP-TUY Agencia/Jean Carlos Rodríguez
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