El grupo rechaza la decisión judicial que quitó ciudadanía a miles de descendientes de haitianos
SANTO DOMINGO. Los países de la Comunidad del Caribe siguen buscando formas para presionar a República Dominicana por la sentencia del Tribunal Constitucional de ese país que niega la nacionalidad a los hijos de inmigrantes en situación irregular que hayan nacido en su territorio, lo cual afecta a miles de descendientes de haitianos.
La Confederación Caribeña de Iglesias (CCC, por sus siglas en inglés) se unió ayer a quienes han solicitado bloquear el proceso de ingreso de República Dominicana al Caricom (grupo en el que tiene el estatus de observador) y expulsarla del Cariforum, grupo ampliado para las negociaciones con la Unión Europea.
“Esta es una cuestión fundamental de derechos humanos. Es posible que tengamos que reconsiderar la entrada de República Dominicana ya que estos no son los valores que defendemos en el Caricom”, declaró el secretario general de la CCC, Gerard Granado, al diario Trinidad Guardian.
El Caricom emitió un comunicado el 17 de octubre en el que describió la sentencia del tribunal dominicano como contraria a las decisiones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, que ha llamado repetidamente al gobierno de Santo Domingo a tomar medidas que garanticen el derecho a la nacionalidad.
La primera ministra de Trinidad y Tobago, Kamla Persad-Bissessar, convocó una reunión especial del grupo para evaluar “iniciativas eficaces” contra la sentencia. El encuentro había sido pautado para ayer, pero fue postergado y aún se desconoce la nueva fecha.
Norman Givan, profesor de la Universidad de las Indias Occidentales y buen oficiante de la ONU para la controversia existente entre Venezuela y Guyana, dijo al Trinidad Guardian estar decepcionado por la tardanza del Caricom en reunirse para hablar sobre el caso. “Es un asunto de extrema urgencia. Espero que puedan convocar la reunión tan pronto como sea posible”.
Sin petróleo barato. El primer ministro de San Vicente y las Granadinas, Ralph Gonsalves, propuso la semana pasada que República Dominicana también sea suspendida de Petrocaribe, la iniciativa de Venezuela para suministrar petróleo en condiciones preferenciales a los países de la región.
La propuesta sería presentada por los países del Caricom al presidente Nicolás Maduro durante la próxima reunión de Petrocaribe, que se realizará el 16 de diciembre en Caracas.
El gobierno dominicano ha rechazado las presiones de los países caribeños y ha argumentado la soberanía de los estados para adoptar decisiones, aunque ha manifestado su disposición a dialogar con la comunidad internacional. Santo Domingo también envió una misión a Venezuela para explicar su posición en torno a la sentencia judicial criticada por el Caricom. Caracas todavía no ha emitido opinión sobre el tema.
Agencias