Fuentes consultadas afirmaron carecer de datos sobre la identidad de los fallecidos, aunque un diario local afirmó que, según la inteligencia paquistaní, eran de miembros de la insurgencia
ISLAMABAD. Tres personas murieron y otras cuatro resultaron heridas a causa del bombardeo efectuado por un avión espía de Estados Unidos en la zona tribal de Waziristán del Norte, en el noroeste de Pakistán, informaron ayer fuentes oficiales.
El avión no tripulado o ‘drone’ lanzó dos misiles contra una vivienda en la capital del distrito, Miranshá, poco antes de la pasada medianoche local, según un funcionario de la administración local de Waziristán del Norte.
Un miembro del organismo de coordinación de las zonas tribales, situado en la cercana ciudad de Pesháwar, confirmó a medios los detalles del ataque y precisó que tuvo lugar en el barrio de Chashma.
Las fuentes consultadas afirmaron carecer de datos sobre la identidad de los fallecidos, aunque el diario local Dawn afirmó que, según la inteligencia paquistaní, eran de miembros de la insurgencia.
El bombardeo se ha producido apenas horas después de que se desvelara el nombre del nuevo jefe del Ejército, el general Rahil Sharif, quien tomó posesión de su cargo de manos de su antecesor, Ashfaq Pervez Kiyani, en una ceremonia celebrada este mediodía.
Los controvertidos ataques con aviones no tripulados generan cada vez más voces críticas dentro de Pakistán así como desde organizaciones internacionales de derechos humanos, e incluso de Naciones Unidas, por la muerte de civiles.
El ataque de hoy llega cuando arrecian las protestas en Pakistán contra los bombardeos de Estados Unidos en suelo paquistaní, en especial desde el principal partido de la oposición, el PTI del excriquetista Imrán Khan, que esta semana convocó manifestaciones en todo el país.
El pasado miércoles, un abogado local presentó con apoyo del PTI una denuncia ante la Policía contra el jefe de la CIA en Pakistán, Craig Osth, que vio así desenmascarada su identidad, como ya sucedió en 2010 y en circunstancias similares con uno de sus antecesores.
La denuncia presentada hace referencia a un bombardeo ocurrido hace una semana en una madraza del distrito noroccidental de Hangu y que mató al menos a seis personas, entre ellos varios estudiantes de la escuela coránica, según autoridades de la zona.
Fuentes de inteligencia locales también afirmaron que entre los fallecidos en el ataque había tres cabecillas de los talibanes afganos.
Hace un mes, otro bombardeo de Estados Unidos en la región de Waziristán del Norte acabó con la vida del líder de la principal facción talibán paquistaní, Hakimulá Mehsud, justo cuando las autoridades de Islamabad se disponían a iniciar conversaciones con la insurgencia.
Este año se han registrado en total una veintena de bombardeos que han provocado la muerte de unas 140 personas, unas cifras mucho menores que las de los últimos años en lo que se refiere a este tipo de operaciones aéreas de Estados Unidos en suelo paquistaní.
Agencias