El estado sureño se une ahora a dieciséis estados y el Distrito de Columbia de EE. UU. que ya reconocieron el matrimonio entre personas del mismo sexo
La Corte Suprema del estado de Nuevo México (EE. UU.) declaró ayer legal el matrimonio homosexual porque considera inconstitucional que las parejas del mismo sexo no cuenten con los mismos derechos que las heterosexuales.
Así, Nuevo México (sur) se une a dieciséis estados y el Distrito de Columbia que ya reconocieron el matrimonio entre personas del mismo sexo.
«Todos los derechos, protecciones y responsabilidades que se derivan de una relación conyugal deberían aplicarse por igual tanto a parejas casadas del mismo sexo como del género opuesto», resolvió el máximo tribunal del estado sureño, según aparece en la sentencia hecha pública.
Enfoque
De esta manera, la corte aclaró cómo Nuevo México debe enfocar las uniones de personas del mismo sexo, después de que algunos condados empezaran a entregar licencias de matrimonio a parejas gais y un juez resolviera este año como inconstitucional no autorizarlo.
La resolución intenta resolver dudas sobre el encaje de esas uniones en la legislación estatal: por un lado, los estatutos ni prohíben ni autorizan estas uniones, pero sólo puede solicitar los documentos de matrimonio una pareja formada por un hombre y una mujer.
La resolución de la Corte Suprema del estado respalda así las decisiones de los condados de emitir certificados de uniones a parejas homosexuales y declara a la vez inconstitucionales los procesos actuales para solicitar matrimonio en los que se exige que la pareja sea heterosexual.
«El matrimonio civil se interpretará en el sentido de la unión voluntaria de dos personas (…). Todos los derechos, protecciones y responsabilidades que se derivan de la relación conyugal se aplicarán igualmente tanto a los del mismo género como a las de diferente», dicta la resolución en sus conclusiones.
La resolución se suma a la tendencia en los últimos años de reconocimiento de esas uniones en varios estados de EE. UU., ya sea con resoluciones de la Corte Suprema, leyes promovidas por el poder legislativo o votaciones populares.
Dieciséis estados y el Distrito de Columbia ya habían reconocido el matrimonio entre personas del mismo sexo y en junio un fallo del Tribunal Supremo federal declaró inconstitucional la Ley de Defensa del Matrimonio.
Esa norma federal lo definía como «la unión entre un hombre y una mujer» e impedía que los homosexuales casados en los estados donde es legal lograran reconocimiento y beneficios fiscales a nivel federal.
Agencias