Son chistes, juegos, canciones, prácticas peculiares o auténticas fiebres que gracias a la plataforma de internet se convirtieron en fenómenos virales con una audiencia de millones de internautas.
Cada año aporta su cuota de entretenimiento, y en 2013 hubo varias de estas «joyas» virales.
La lista incluye a la cantante Beyoncé, que según Bing fue la palabra más buscada de 2013, por encima de Kim Kardashian, reina de las búsquedas en 2012. Pero también juegos, aficiones y hasta películas de retorcidos argumentos.
Ésta es una selección de historias que causaron furor en la red. Y usted, ¿se acuerda de alguna otra?
1- El Harlem Shake
Este baile despatarrado al ritmo de un tema que parece en principio un reggaeton y que arranca con la frase «Con los terroristas…» fue uno de los primeros videos en enloquecer a la audiencia por YouTube.
Todo comienza con una persona que se pone a bailar mientras aquellos a su alrededor se mantienen indiferentes. A los 15 segundos, el resto de la gente se une al bailarín solitario en una danza frenética que acaba con el final de la pieza, 15 segundos más tarde.
Este meme (concepto repetitivo compartido a través de la red) se originó en un video del comediante y videoblogger Filthy Frank y está influido por un baile nacido en el neoyorkino barrio de Harlem, en los años 80.
La canción «Harlem Shake» fue creada por el DJ estadounidense Baauer. A diferencia del viral de Gangnam style, un éxito rotundo en 2012, el «Harlem Shake» no tiene un video original de referencia, sino que todos son versiones de una ocurrencia.
2- La adicción al Candy Crush
Parecía un inocente juego para plataformas móviles en el que había que agrupar dulces en la pantalla según su color. Sin embargo, sus 400 niveles atraparon a más de 50 millones de usuarios que no pudieron despegarse de las pantallas.
En 2013, se coronó como el juego más popular en la historia de Facebook.
Esto ocasionó que cualquiera que tuviera un perfil sufriera jugándolo, o padeciera la insistencia de sus amigos en «invitarlos» a jugar y así ganar vidas.
El impacto fue tal, que aparecieron fotos en las redes de un supuesto centro de rehabilitación para adictos del Candy Crush. Las fotos resultaron falsas, pero muchos -reconociendo el impacto que el juego tuvo en ellos- no dudaron en creerlo.
3- #Foodporn
Este hashtag, que etiqueta las fotografías de comida en las redes sociales, se ha usado hasta 18 millones de veces al día. Para un numeroso grupo de usuarios, se trató de una forma de compartir con el mundo –de forma atractiva- lo que había en sus platos.
Sin embargo, otros la convirtieron en una fiebre tan ardorosa, que los llevaba a impedir que el resto de los comensales comenzaran a comer hasta que los platillos no fueran cuidadosamente fotografiados y publicados en las redes sociales, y en particular Instagram.
Algunos asiduos de esta práctica aseguran que «inmortalizar lo que pedimos en un restaurante forma parte de la experiencia gastronómica».
La obsesión llegó a tal punto, que algunos restaurantes intentaron prohibir la práctica para evitar que los «malos fotógrafos» hicieran que sus platos lucieran poco apetitosos… en un esfuerzo para escapar así de una posible mala publicidad.
4- Las «selfies»
Ese gusto por tomarse por sí mismo una fotografía –a un brazo de distancia- con la cámara del celular llegó a tal punto, que incluso se coronó como la clicpalabra del año en inglés.
Las selfies cobraron personalidad propia y se han convertido en un sinónimo común para autorretrato. Personalidades, políticos y miles de usuarios sucumbieron a su encanto.
El diccionarios Oxford la define como «una fotografía que uno se ha tomado, generalmente con un teléfono inteligente o una cámara web y la publica en el sitio web de alguna red social».
El uso de ese hashtag o etiqueta en sitios como Flickr ayudó a impulsarla. De ahí pasó a inundar redes sociales como Instagram -en la que se han compartido unos 60 millones de estas fotos- en cuestión de meses.
Sin embargo, las selfies han sido un blanco fácil de las críticas por quienes las asocian con vanidad y narcisismo de parte del autor. ¿Acaso no son esas algunas de las características principales de nuestros perfiles en redes sociales?
5- Unos segundos de video
Tras el éxito de los mensajes de sólo 140 caracteres, la moda del contenido corto alcanzó al video en redes sociales. En sólo unos meses, la fiebre atacó a los adeptos al «cortometraje» en su versión cortísima: Vine (propiedad de Twitter) planteó el reto de contar la historia en 6 segundos e Instragram (propiedad de Facebook) la limitó a 15.
Las nuevas aplicaciones generaron reacciones masivas: gente que «desaparecía» a otra –gracias a trucos de edición-, expertos en «hágalo usted mismo», o incluso marcas que decidieron usar la plataforma para atraer usuarios.
A la fecha, más de 40 millones de usuarios comparten pequeños clips en Vine subiendo, según sus propias estadísticas, unos cinco clips cada segundo a Twitter, lo que han ocasionado que la red no sea sólo un canal de conversación, si no un centro de entretenimiento.
Sin contar, claro está, los pequeños errores de su lanzamiento, como el de quien publicó un clicvideo pornográfico bajo en el espacio de «selección de los editores».
6- Los spoilers de Breaking Bad
Tras cinco años -o 62 episodios- pegados a las pantallas siguiendo las aventuras de Walter White y Jesse Pinkman, en 2013 la famosa serie de televisión Breaking Bad llegó a su final.
Según la firma de análisis de mercado Nielsen, más de 10,3 millones de fanáticos de la historia vieron el domingo 29 de septiembre su último capítulo en Estados Unidos.
Sin embargo, para muchos seguidores en el resto del mundo, el episodio final de la historia de un inofensivo profesor de química convertido en un despiadado miembro del narcotráfico todavía tenía que llegar a sus países.
Y así nació la fiebre –y el horror- ante los spoilers en las redes sociales, o lo que es lo mismo, usuarios que daban a conocer el desenlace de la historia antes de que medio mundo pudiera verlo por televisión.
Para contrarrestarlo, llegaron los spoilers alert, una especie de advertencia para evitar leer el contenido de ciertos mensajes que develaban el final, además de decenas de clicaplicaciones que bloqueaban cualquier referencia a la serie.
En cualquier caso, nosotros no dijimos el final.
7- El bebé real
En 2012, sucumbimos al compromiso, la boda, el anuncio del embarazo y el guardarropa de la duquesa de Cambridge, Kate Middleton. Pero no fue suficiente.
En este año, la cuenta atrás y la espera del nacimiento del príncipe George saturó las redes sociales -principalmente Twitter-, con el hashtag #RoyalBaby.
La noticia del nacimiento del hijo de William y Kate generó 2 millones de menciones en un día, el 22 de julio, y un pico de 25.000 tuits por minuto, según datos de la red social.
Y es que, no sólo el ingreso de la duquesa al hospital, sino también el nacimiento del primogénito, fue anunciado por esa red por la Casa Clarence, la cibervocería de los herederos a la corona británica.
Y pensar que algunos esperaban el pequeño boletín en un caballete en el palacio de Buckingham, tal como ocurrió con su padre y abuelo…
8-«Sharknado»
Un tornado de proporciones gigantes succiona a cientos de tiburones hambrientos del océano y los deja caer en la ciudad de Los Ángeles.
Esta película de televisión de bajo presupuesto, cuyo argumento es bien poco convincente, por no decir totalmente disparatado, se convirtió en un fenómeno en las redes sociales.
Tal fue su éxito en la red que la película llegó al cine.
La cinta está protagonizada por Ian Ziering, de la popular serie juvenil de los ’90 «Beverly Hills 90210», y Tara Reid, quien aparecía en la comedia «American Pie» (1999).
Cuando se estrenó, «Sharknado» (mezcla de tiburón y tornado) recibió más de 400.000 menciones en Twitter.
9- Beyoncé
Los reflectores apuntaron hacia ella desde inicio del año, cuando aceptó haber hecho playback (o doblaje) en la toma de posesión del presidente Obama. De ahí, su nombre no paró de ser trending topic en redes sociales.
Los usuarios levantaron polémica por las fotografías poco favorecedoras de la estrella tomadas por un fanático durante el Súper Bowl, los congresistas estadounidenses comentaron su controversial visita a Cuba, incluso hablaron de su participación en la manifestación por Trayvon Matin (el joven asesinado el año anterior en Florida). Pero lo que la hizo estar en boca de todos fue su pelo.
Ocurrió primero,cuando en medio de un concierto en Montreal, Canadá, la cabellera de la cantante se clicenredó en las aspas de un ventilador mientras ella cantaba. Casi sin inmutarse, la cantante continuó interpretando su éxito «Halo», hasta que pudo zafarse del artefacto.
El video del momento se convirtió en viral casi de inmediato.
Sólo una semana después, la artista –reconocida por su larga melena- sorprendió a sus más de cinco millones seguidores en Instagram con un clicnuevo corte de pelo. Otro momento que fue multitudinariamente compartido y comentado.
Sin embargo, apenas estábamos viviendo el furor de la nueva melena corta de la estrella estadounidense cuando reapareció en público en un concierto en Highlands Park, en Reino Unido, con el pelo… otra vez largo.
10- Miley Cyrus
La actriz, conocida por protagonizar la serie para niños Hannah Montana, apareció en agosto los premios MTV con la intención de deshacerse de esa imagen infantil.
Y al parecer cumplió su cometido. Su presentación en el evento con un bikini plastificado color piel y bailando al estilo twerking (o perreo), con evidentes gestos sexuales, desató la furia de las redes sociales. Unos a favor y otros en contra -como el Consejo de Padres para la Televisión de EE.UU.- hicieron referencia a la polémica presentación.
A la comentada actuación, le siguió el lanzamiento del video «Wrecking Ball» y la publicación de un estudio fotográfico, en los cuales aparecía semidesnuda.
Y para aumentar la polémica, se produjo un intercambio de opiniones con la cantante irlandesa Sinead O’Connor, quien le escribió una carta abierta a la estrella del pop pidiéndole que no se deje prostituir por la industria de la música.
Cuando parecía que las redes estaban dejando a Cyrus en paz, la chica apareció fumando lo que parecía un cigarro de marihuana en el escenario de los MTV EMA’s. Para finales del año, Cyrus se ganó un lugar en la lista de las personas menos influyentes del 2013, de la revista GQ.
En 2013, su nombre se repitió miles de veces en redes sociales. Y sólo acaba de cumplir 21 años.
BBC