Cargando dos de las seis urnas donde reposaban los cadáveres de los jóvenes abaleados, los allegados a las víctimas se presentaron a la sede policial, solicitando la captura de los homicidas y algunos, iracundos, lanzaron piedras contra las instalaciones policiales, partiendo vidrios y destrozando un teléfono público
Visiblemente conmocionados por lo ocurrido, parientes de los seis jóvenes masacrados en la parada de transporte público del sector Los Mamones de Súcuta en Ocumare del Tuy tomaron, al mediodía de ayer, la sede del Cicpc donde apostaron cuatro de las urnas en las que reposaban los cuerpos sin vida para exigir justicia.
Adicionalmente se supo de voceros policiales que los homicidas, quienes responden a los remoquetes de «El Pao», «Frank», «El Iván» y «Bigote de Brocha», podrían ser detenidos en las próximas horas, según reveló una fuente de la policía científica de la zona. A estos pillos se les señala de ser integrantes de la banda de un sujeto apodado «El Miguel».
Como se recordará, el pasado viernes en la noche fueron asesinados a balazos Yoiner José Cádiz Taborda, 15 años, Maikel José Aray Méndez (19), Yorman Jesús Salazar (16), Jackson Antonio Hernández (20), Jhoan Martínez Cadíz (19) y Oniyer Yoalbis Salazar de 18 años. Tal como lo reseñamos con carácter de primicia, los primeros cinco jóvenes murieron en el sitio del suceso, mientras que el último falleció, luego de ingresar al hospital local. Los cadáveres presentaron heridas producidas por proyectiles disparados por fusiles R-15, FAL, escopetas y pistolas nueve milímetros.
Los ahora criminales, cuando cometieron la masacre, se desplazaban en un vehículo marca Chevrolet, modelo Corsa, color verde oscuro.
Este sangriento hecho ha causado estupor en el sector Súcuta y en la población de Ocumare del Tuy. Los parientes y allegados de los infortunados aseguraron que eran muchachos de buena conducta, algunos estudiantes de bachillerato, como se reflejó en La Voz de ayer. »Estos jóvenes pasaban el mayor tiempo jugando caimaneras de fútbol y de béisbol en el mismo sector donde vivían. Eran tranquilos, por lo que no se justifica que los hayan masacrado de esta forma», dijo a las puertas del Cicpc, Luis Salazar, tío de dos de los infortunados. El hombre exigió justicia.
«Pedimos que el Cicpc nos dé una respuesta en una semana sino realizaremos acciones de protesta porque nuestros familiares fueron asesinados malamente, ya que ellos no tenían problemas con nadie. A ellos los mataron por maldad», aseveró el hombre, junto a otros dolientes del resto de los asesinados.
Es importante destacar que dos de los féretros, donde eran llevados los restos de los jóvenes ultimados, los colocaron en la puerta principal de la sede judicial, mientras que dos más fueron puestos en la puerta del estacionamiento. El resto de las urnas permaneció en las carrozas fúnebres.
Algunos de los exaltados lanzaron piedras contra la sede del Cicpc, logrando partir varios vidrios. También desplomaron el teléfono público, ubicado en la entrada de la institución.
Luego, los dolientes continuaron su peregrinar hasta el campo santo municipal de Ocumare del Tuy donde finalmente dieron sepultura a los seis muchachos.
«Vamos por ellos»
En declaraciones exclusivas para el Diario La Voz el jefe de la región del Cicpc de Miranda, comisario Wilfredo Carrasco, señaló que el ente judicial ha conformado un equipo multidisciplinario que está llevando a cabo las investigaciones de la masacre. La comisión la está dirigiendo el propio comisario.
Reveló que aún no se tiene un móvil concreto del séxtuple homicidio, pero dejó entrever que al parecer uno de los hoy occisos, no detalló quién, sostuvo un impasse con los integrantes de la banda de «El Miguel» en la Urbanización Ezequiel Zamora, ubicada frente al sector El Placer de Marare en Ocumare del Tuy; zona donde también opera este grupo delictivo. El incidente ocurrió días atrás y quizá haya sido la causa del sangriento hecho.
«Las investigaciones están bien adelantadas. Vamos por ellos; por los matadores. No podemos adelantar mayores detalles porque no queremos fuga de información, pero ya tenemos más o menos claro el móvil del suceso», dijo Carrasco, quien presume que el resto de los jóvenes resultó víctima inocente. «Pagaron justos por pecadores, ya que estos malandros fueron por uno y mataron a todos los demás», añadió.
Por último pidió a los familiares de las víctimas y a los vecinos de Súcuta un voto de confianza para la policía científica, «puesto que le vamos a dar respuesta más temprano de lo que imaginan».
Solicitan cese a la violencia
Los pobladores de Ocumare del Tuy están conmovidos con esta masacre. Piden a las autoridades policiales, judiciales y gubernamentales enfrentar el tema de la inseguridad cuanto antes.
«Ya basta que en cada esquina maten a alguien. Hoy, porque este caso ha llamado la atención de la colectividad está siendo investigado pero cuantos crímenes no quedan impunes y los homicidas vuelven a delinquir; esto parece no importarle a nadie», expresó la vecina Margarita Rojas, quien pide que el problema sea atacado «sin politiquería pero sí con voluntad política».
MIP-TUY Agencia
miptuyagencia@cantv.net