La oposición venezolana pidió hoy al Gobierno declarar una «emergencia nacional» para combatir la inseguridad y encarar una «revisión profunda» de las políticas implementadas para atacar el problema, que volvió a ocupar el centro de la agenda pública tras el asesinato de una exreina de belleza.
El llamado a decretar una emergencia fue formulado por el alcalde de Caracas, Antonio Ledezma, un día después de que el país se viera conmovido por el asesinato de la exmiss Venezuela Mónica Spear, de 29 años, y de su marido, de 39 años, a manos de delincuentes en una carretera del céntrico estado de Carabobo.
«Habría que declarar en emergencia nacional a Venezuela. Este problema de Mónica Spear, de su esposo, que todos lamentamos, se reproduce. Han muerto muchas ‘Mónicas Spear’ en Venezuela», afirmó en una entrevista con el canal privado Globovisión.
Ledezma acusó al Gobierno de Nicolás Maduro de alimentar la espiral delictiva al alentar la impunidad por supuestamente haber debilitado la independencia del Poder Judicial y el funcionamiento de los cuerpos de seguridad.
«Esto es consecuencia de esta política de impunidad y la impunidad se nutre de la falta de separación de poderes, mientras se le siga metiendo mano a los tribunales para imponer jueces obedientes (…) aquí va a seguir creciendo la inseguridad», alertó.
A estas críticas se sumó un comunicado de la alianza opositora Mesa de Unidad Democrática (MUD) que exhortó al Gobierno a aplicar «con carácter de urgencia» medidas estructurales dirigidas a prevenir el delito.
«El Gobierno nacional necesita realizar una revisión profunda de las políticas que viene ejecutando en materia de seguridad ciudadana, las cuales evidentemente no han dado resultados positivos», señaló la MUD en su comunicado, donde sostiene además que el caso de Spear «refleja la desbordada criminalidad» en el país.
«El Gobierno nacional no puede continuar evadiendo su responsabilidad en esta materia. Los venezolanos merecemos que este tipo de hechos no continúen ocurriendo», concluye el comunicado.
Horas después de conocerse la muerte de Spear, Maduro expresó su «tristeza» por lo ocurrido y adelantó para hoy una reunión con los 23 gobernadores del país para coordinar soluciones frente a la inseguridad.
Maduro prometió «ir a fondo» y actuar con «mano de hierro» contra los responsables del crimen, por el que hay cinco sospechosos detenidos.
Según el Gobierno, Venezuela, con alrededor de 29 millones de habitantes, cerró el 2013 con una tasa de homicidios de 39 por cada 100.000 habitantes, pero organizaciones no gubernamentales como el Observatorio Venezolano de Violencia hablan de una media de muertes violentas de 79 por cada 100.000 habitantes.
El oficialismo culpa de parte de la inseguridad a los «antivalores» sembrados por capitalismo y ha acusado también a los medios de alimentar la «paranoia» al cubrir hechos policiales, aunque Maduro también ha reconocido que la criminalidad es un problema y ha sacado a los militares a las calles para reducir la tasa de delitos. EFE