En la mañana de este miércoles, el dólar paralelo en Venezuela era 11 veces la tasa oficial de cambio, que es 6,3 bolívares por dólar.
Pero en la tarde, después de que el gobierno anunció unas medidas que en parte buscan minimizar esa amplia brecha entre ambas tasas, el ilegal dólar paralelo se situó a 12 veces el cambio oficial.
El gobierno creó un nuevo sistema de control de cambio en el que varios sectores de la economía dejan de cambiar dólares con la tasa de 6,3 y pasan a una más alta, probablemente del doble.
La difícil situación de la economía venezolana, con un déficit fiscal del 15% y una inflación desbordada, llevó al gobierno de Nicolás Maduro a hacer esta «devaluación encubierta» -según la catalogaron economistas- para obtener más bolívares por cada dólar y así saldar sus deudas.
Pero otro de sus objetivos es acabar con el denominado «innombrable», aquel dólar del mercado negro que se desarrolló en los últimos años a medida que el Estado -único responsable de vender divisas internacionales en Venezuela- dejó de ser capaz de suplir la demanda de dólares que hay en el país.
Cambiar plata en el mercado negro es un crimen, pero se ha vuelto una práctica tan común entre los venezolanos que muchos sectores económicos calculan sus costos a partir de esa tasa.
Pero, ¿por qué la «devaluación encubierta» generó ese salto en el dólar paralelo? ¿Cómo se calcula esta tasa que ha llegado a generar un estilo de economía alternativa con precios desorbitantes?
Divulgadores ilegales
A pesar de que es ilegal divulgar la tasa del mercado negro, existen diferentes medios de comunicación digitales que publican dicha información en internet en contra de la ley y de la voluntad del gobierno.
Uno de ellos es Dolar Today, un grupo de 12 jóvenes venezolanos que se identificaron en entrevista con BBC Mundo como «una forma de protesta ante un régimen dictatorial empeñado cada vez más en silenciar e intimidar a los medios de comunicación en Venezuela».
En su página, los integrantes de Dólar Today -que dicen ser personas especializadas en economía y computación, entre otras- explican cómo estiman la tasa del «innombrable».
Lo primero que hacen es llamar a las casas de cambio en la ciudad colombiana de Cúcuta, en la frontera con Venezuela, donde dependiendo de la oferta y la demanda de bolívares que hay en la calle en determinado momento los cambistas pueden estimar una tasa del dólar negro usando el peso colombiano como referencia.
Después de preguntar en Cúcuta, los jóvenes del Dolar Today hacen un promedio con otra tasa que sacan dividiendo la liquidez monetaria del día y las reservas internacionales del país, que durante los últimos meses han estado a la baja.
Sin embargo, el director del centro de investigación económica Econométrica, Ángel García Banchs, asegura que no hay necesidad de tomar en cuenta la masa monetaria.
«La tasa del mercado negro es un precio que se estima en Cúcuta, donde al haber libertad de cambio las divisas se puede comprar y vender sin control y eso genera un precio implícitamente», explica.
«Nivel de incertidumbre»
En Cúcuta, hay decenas de casas de cambio que operan en pequeños locales informales y prestan todas el mismo servicio.
En una zona fronteriza de no más de tres cuadras, llamada La Parada, los cambistas estiman cada hora una tasa no oficial para el cambio de pesos colombianos por bolívares venezolanos. «Nosotros nos informamos por varias partes para saber cuál es el cambio, que cambia varias veces», le dice a BBC Mundo Jose María Gonzales, un cambista en la zona.
«Pero honestamente, nosotros no sabemos cómo se fija esa tasa, sino que se va acomodando sola», admite.
En efecto, expertos en economía venezolana coinciden en que no hay una teoría detrás del dólar paralelo, porque no hay marcadores macroeconómicos que lo expliquen.
Se trata, al fin y al cabo, de un mercado negro sin ley ni reglas de juego que opera más o menos a la deriva. «La tasa del dólar negro obedece al nivel de incertidumbre», explica el economista Maxim Ross.
«Entre más cambian la política monetaria, y en la medida que no haya una política integrada del gobierno, el dólar paralelo solo va a seguir subiendo», opina.
Eso explica por qué la tasa pegó un salto este miércoles, tras el anuncio de las medidas económicas del gobierno, así como ocurrió la semana pasada, cuando el presidente Nicolás Maduro hizo lo propio en su rendición de cuentas ante la Asamblea Nacional venezolana: en ambas intervenciones fueron muchas las preguntas que quedaron sin responder.
Distorsiones
En el último año -mientras la inflación, la escasez y en general la economía han sufrido su peor deterioro en décadas- el dólar paralelo se ha disparado: en junio de 2012 doblaba la tasa oficial del dólar, pero ahora supera su valor por más de una decena de veces.
El gobierno venezolano sostiene que dicha tasa es generada por «especuladores» que buscan «sabotear la economía» y bloqueó las diferentes páginas que, como Dolar Today, divulgan la tasa del dólar paralelo.
Rafael Ramírez, vicepresidente del Área Económica, quien fue el encargado de hacer los anuncios el miércoles, dijo que «hoy no hay ningún fundamento para que haya un dólar paralelo», en el sentido de que, según él, el dólar paralelo es inducido.
«Hemos dicho a los sectores económicos nacionales que no se dejen estafar por el mercado paralelo, que no se dejen robar por un sector especulativo antinacional», dijo Ramírez.
Pero economistas de línea opositora creen que con el rígido control de cambio impuesto por el gobierno hace diez años es inevitable que se produzca la demanda por dólares que origina el mercado negro.
Banchs explica que el dólar paralelo incentiva la exclusión social, porque distingue entre «los bobos que se mantienen legales y los vivos que se hacen ricos».
Además, añade, se generan distorsiones en la economía que disparan la inflación.
Distorsiones como que una botella de agua cueste US$1,5 o US$0,1 al mismo tiempo. En la misma tienda.