Unos veinte sujetos armados llegaron el pasado viernes en motos y en carros -uno con coctelera policial- sometiendo a las personas que estaban en la calle Italia, se llevaron a Alimber José Rojas Camacho y lo asesinaron. Este martes hallaron el cadáver en la morgue de Bello Monte
El cadáver de Alimber José Rojas Camacho, de 29 años de edad, fue localizado este sábado en un barranco de la carretera a La Mariposa, vía Las Mayas, en el estado Miranda. Estaba desaparecido desde el viernes a la media noche, cuando un grupo armado se lo llevó de la calle Italia, en Altavista, Catia.
Esa noche la víctima se reunió con un grupo de amigos en la calle para disfrutar del encuentro de la final de la liga de béisbol profesional que se disputan Caribes y Magallanes. Unos veinte sujetos armados llegaron en motos y en carros, sometiendo a las personas que estaban en la calle.
Uno de los delincuentes, que vestía capucha, era quien giraba instrucciones. A Rojas lo apartaron del resto de personas y se lo llevaron a la fuerza en uno de los vehículos. Los antisociales partieron del lugar sin dejar rastros ni identificarse.
Los testigos del hecho aseguraron que uno de los vehículos tenía una coctelera, lo que les hace presumir que entre los responsables había policías. Hace diez años, un hermano de la víctima fue asesinado en ese mismo lugar a manos de un funcionario policial que fue destituido de su cargo y luego reincorporado con un cargo mayor.
Cuando los delincuentes se llevaron a Alimber Rojas, la familia se dividió para salir a buscarlo. Un grupo se fue a las comisarías, mientras otros acudieron a la morgue de Bello Monte donde les indicaron que allí había un muerto que fue registrado con el apellido Montilla.
Este martes estuvieron del vuelta en la morgue y al verificar en los archivos de fotos se dieron cuenta que se trataba de Alimber. Recibió cinco tiros en la parte posterior de la cabeza y fue arrojado a un barranco en La Mariposa.
Sus familiares han decidido una vez más denunciar el caso ante la Fiscalía, pues sospechan que este crimen guarda relación con la muerte de su hermano. Temen que el asesino del primero está involucrado en ese hecho y que ha decidió vengarse por las denuncias que la familia ha llevado ante el Ministerio Público.
Este mal episodio comenzó hace 10 años, cuando José Rojas, de 27 años, hermano de Alimber, discutió en la calle con un policía que le reclamó porque lo encontró recostado en un muro de Altavista consumiendo droga.
La familia aseguró que días más tarde, el mismo policía lo mató al encontrarlo solo en la calle. En esa ocasión el asesino estaba con otro funcionario. Al joven le sembraron un arma para hacer creer que había muerto en un enfrentamiento, pero fallaron en su montaje porque entre otros detalles, el arma se le colocó en la mano izquierda y el muchacho era diestro.
En esa ocasión un hermano de la víctima que fue testigo del hecho resultó herido y su testimonio permitió esclarecer la muerte, pese a que fue amenazado de muerte cuando se recuperaba. Al policía lo destituyeron del cargo aunque nunca fue a prisión, más tarde lo reincorporaron y ahora se sienten amenazados.
Paula Rojas, hermana de la víctima, dijo que hace dos años, una comisión policial llegó a la vivienda de Alimber Rojas para llevárselo preso pero como no lo encontraron se llevaron a un hermano adolescente. Esta denuncia también fue elevada ante las autoridades pero nunca recibieron una respuesta.
La joven cree que existen privilegios para aplicar justicia en el país. “Nosotros no somos Mónica Spear pero también somos seres humanos y merecemos justicia. Aunque en el caso de Mónica Spear también ignoraron a su esposo y eso no es justo”, expresó.
A su hermano Alimber Rojas le robaron un arma de fuego Prieto Beretta de porte personal con la que trabajaba en una empresa de seguridad industrial que tiene la familia. “Mi hermano no tenía historial policial y eso pueden verificarlo”, aseguró.
AA