Los niños comienzan a experimentar estrés y algunos han sido remitidos a psicólogos por el impacto sufrido
La populosa comunidad de Arichuna, municipio Cristóbal Rojas de los Valles del Tuy del estado Miranda, ha sido azotada por el hampa desbordada en las últimas semanas, a través de diversos eventos delictivos, entre los que figuran el acoso que sufren los estudiantes de la escuela básica ubicada a la altura de la tercera etapa de esta urbanización por parte de malandros que los asaltan, según informaron fuentes vecinales.
El acoso delictivo contra los escolares sucedió el pasado viernes 24 de enero, cuando sujetos, la mayoría muchachos que se encontraban en un carro rojo, sacaron armas para apuntar a los estudiantes de la escuela de Arichuna, a eso de las 12 del mediodía. Los hampones llegaron frente a la escuela, y, a punta de pistola, despojaron a una niña de un celular y un bolso, mientras los demás pequeños, con edades entre ocho y diez años, huyeron despavoridos por la situación, dejando incluso bolsos en el lugar.
“Nos sentimos desasistidos por las autoridades regionales, municipales y nacionales. Le solicitamos al alcalde de Cristóbal Rojas, Humberto Marte, tomar cartas en el asunto y ordenar patrullajes en la zona en horas de ingreso y egreso de los estudiantes, quienes ya comienzan a mostrar los efectos psicológicos de verse sometidos a un acto delictivo”, indicó la líder vecinal y vocera principal del consejo educativo de la escuela Arichuna, Omaira Gudiño.
Miedo, ataques de pánico, micción descontrolada y temor a ir a clases son desórdenes de conducta presentados por niños y niñas afectados. “Algunos de estos niños, debieron ser llevados a psicólogos para superar este trauma”, reveló la dirigente comunitaria.
A esto debe sumarse que los postes de luz en las aceras de la vía principal están dañados en las inmediaciones de la primera y segunda etapa, lo que convierte esta avenida en una boca de lobo para quienes regresan del trabajo en horas de la noche y deben quedarse en la redoma de La Peñita para cruzar la intercomunal y dirigirse a los edificios de esta zona residencial. “La calle no tiene iluminación, los postes carecen de mantenimiento, y ya se han registrado robos perpetrados por motorizados y ladrones que llegan en carros que luego se dan a la fuga. Corpoelec debe resolver esta situación de los postes sin luz, porque ya se le han remitido las comunicaciones respectivas”, señaló Gudiño.
De igual manera, algunos vecinos manifestaron la necesidad de que la Cámara Municipal, el Consejo Municipal de Defensa de los Derechos del Niño, Niña y Adolescentes y la Fiscalía actúen para enfrentar el problema, porque se trata de una escuela del Estado que brinda formación a niños y niñas de educación básica, y los concejales deben actuar en función del interés superior de resguardar la integridad física y mental de los muchachos.
MIP-TUY Agencia/Sandy Brito
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