
Manteniendo los accesos a la Universidad Central de Venezuela cerrados como medida de protesta, el gremio de médicos residentes realizó una protesta nuevos mecanismos para la protección del personal y del paciente
La puñalada que recibió el pasado viernes Kevin Campos para robarlo, galeno del Hospital Pérez Carreño, cursante del primer año de la especialidad de anestesiología, por parte de unos antisociales, generó indignación de la colectividad, personal médico y administrativo del centro asistencial, pero también a los médicos residentes de la Universidad Central de Venezuela –UCV- quienes protestaron para exigir más seguridad.
El suceso que ocurrió cuando Kevin se trasladaba al quirófano cerca de las 4:05 de la mañana a buscar un suéter y repentinamente fue interceptado y herido con un arma blanca para robarlo, levantó manifestaciones de reclamo en el sector salud.
Más seguridad
Los galenos de diferentes especialidades realizaron su reclamo exigiendo medidas de seguridad efectivas y concretas, cuya manifestación se realizó manteniendo los accesos del recinto universitario cerrados como medida de protesta, justamente trancaron el puente Salvador Allende que comunica el centro académico con plaza Venezuela.
Con pancartas y consignas buscan llamar la atención de las autoridades del clínico. El día de ayer le hicieron entrega al director una serie de peticiones para que se tomen medidas de inseguridad en el centro asistencial.
Al respecto, mencionó la residente Saria Laguna, que tienen al menos dos años prestando servicio en esta institución y aunque no ha sido objeto del hampa, considera que deben aplicarse medidas de seguridad que le garanticen protección al trabajador. “Nosotros fuimos preparados para mantener y recuperar la salud humana, pero vemos con mucha preocupación que no existen políticas que nos garantizan las nuestras, criticó.
En esto coincide, Natacha Gómez, otra residente quien destacó que ésta manera de protestan es con la finalidad de hacerle llegar a las autoridades de la institución y gubernamentales que de una vez por todas tomen cartas en el asunto, dado que “somos personas que se dedican a preservar el bienestar de la comunidad y por ende afecta la atención del paciente”.
Los residentes dan un plazo de siete días para que comiencen a aplicarse esas medidas, de no acatarse sus peticiones advirtieron que paralizaran la consulta externa de todos los servicios
Mairy Chourio / Mchourio@diariolavoz.net / @mairychourio