La presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, firmó ayer una declaración de adhesión a la Alianza del Pacífico y se comprometió a «enriquecer» este mecanismo de integración formado por Chile, Colombia, México y Perú.
Chinchilla asiste como invitada a la octava cumbre de la Alianza del Pacífico, que se celebra hoy en Cartagena de Indias (Colombia). La presidenta agradeció a sus colegas de Colombia, Juan Manuel Santos; de Chile, Sebastián Piñera; de México, Enrique Peña Nieto; y de Perú, Ollanta Humala, el haber permitido que «Costa Rica sea el primer país que inicia formalmente el camino de la incorporación en la Alianza del Pacífico».
Mediante la declaración que firmó Chinchilla Costa Rica se adhiere al Acuerdo Marco de la Alianza, que funcionará como una hoja de ruta hasta su plena integración, lo que se calcula que se concretara en un año.
Por su parte, el presidente colombiano, que ejerce como anfitrión y presidente pro témpore del mecanismo, elogió la gestión de Chinchilla y dijo que «deja una huella que es ni más ni menos que esta hoja de ruta muy bien trazada para que su país entre a formar parte de la Alianza».
El bloque suma el 50 % de la población de América Latina y cuenta con un mercado de 212 millones de personas, que además hoy va a quedar liberalizado al suscribirse un protocolo comercial que establece la eliminación de los aranceles del 92 % de los productos del comercio interno.
Chinchilla se refirió a este hecho como un «hito» y destacó el «trabajo serio, pragmático, sistemático y transparente de cada uno de los países en los distintos ámbitos» de integración no solo comercial, sino también diplomática y educativa.
La Alianza del Pacífico busca convertirse en un espacio de libre tránsito de bienes, servicios, personas y capitales, y después abrirse y estrechar lazos con la pujante región de la Alianza del Pacífico.
Agencias