El ministro del Gobierno británico responsable de las Islas Malvinas comenzó su primera visita al disputado territorio el lunes y generó enojo en Argentina, que lo acusó de prepotencia colonial.
Fuerzas argentinas invadieron las Malvinas en 1982, lo que llevó a Margaret Thatcher, entonces primera ministra de Gran Bretaña, a desplegar una fuerza naval para recuperar las islas en una corta pero sangrienta guerra.
En los últimos años, Argentina ha incrementado los pedidos para que Gran Bretaña discuta la soberanía de las islas, alegando que el territorio le pertenece legítimamente. La campaña ha coincidido con tareas de exploración de petróleo.
Hugo Swire, ministro de estado en la cancillería británica, inició el lunes una visita de cuatro días a las islas,
reafirmando el derecho del Gobierno británico a administrar el territorio.
«Las personas de las Islas Falklands (nombre que dan los británicos a las islas) son británicas porque eligieron serlo», dijo Swire en un comunicado.
Agencias