El Gobierno suspendió por un lapso aún no definido el envío de remesas familiares a personas residentes en Colombia, según se lee en una edición extraordinaria de la Gaceta Oficial que circuló hoy.
La prohibición de enviar divisas desde Venezuela a familiares en Colombia regirá «hasta tanto se instrumente el mecanismo y las nuevas condiciones aplicables para tal fin», dice el texto de la resolución.
La medida se publica cuatro días después de una reunión entre los cancilleres de Venezuela, Elías Jaua, y Colombia, María Ángela Holguín, que culminó con la firma de una batería de acuerdos para combatir el contrabando y otros ilícitos, entre ellos los cometidos con divisas asignadas por el Gobierno venezolano a tasa subsidiada.
Las remesas, según lo acordado por Jaua y Holguín, ya no se realizarán en dólares, sino en pesos colombianos, para hacer frente a quienes se han valido de este mecanismo para revender en Venezuela a precios del mercado ilegal divisas otorgadas por el Estado en el marco del control de cambio en vigor en este país desde 2003.
Dentro de un mes se espera que se realice una reunión para analizar los resultados de la implementación de este conjunto de acuerdos cuyo éxito tiene que ver, según Jaua, con el despertar de la «moral» del pueblo venezolano, de sus funcionarios y militares que deben reflexionar y no participar en estas actividades ilícitas.
La resolución se enmarca dentro de una nueva ofensiva del Gobierno para frenar la salida de dólares del país, que ha incluido la reducción en el monto de remesas familiares que pueden enviarse anualmente y en el cupo de divisas al que los venezolanos acceden para viajar al exterior.
Las medidas fueron recibidas con escepticismo por la oposición, que sostuvo que con ellas no se ataca la «corrupción» que suponen las empresas fantasmas que simulan importaciones para hacerse de dólares baratos, un fraude que el propio Gobierno ha admitido y ha estimado en miles de millones de dólares. EFE