Santos pide diálogo Gobierno-Oposición y Maduro le acusa de «simpatías con el fascismo»
BOGOTA. El presidente de Venezuela Nicolás Maduro, acosado por protestas callejeras en su país, rebatió el martes a su colega colombiano Juan Manuel Santos quien en la jornada pidió diálogo entre los bandos que están en conflicto en la vecina nación.
Santos, que desde que asumió el gobierno en agosto de 2010 ha intentado mantener una amigable relación con Caracas tras varios impases y la ruptura de relaciones, se pronunció por primera vez sobre la protesta de los últimos días y llamó a al gobierno y la oposición a abrir canales de comunicación como forma de mantener la estabilidad democrática.
Desde Caracas, Maduro replicó de inmediato y dijo que Santos no podía darle lecciones de democracia y que sus comentarios revelaban una abierta simpatía por «los fascistas» o como denomina el gobierno venezolano a la oposición.
El impasse fue el primero desde que Santos recibió en la casa de gobierno de Bogotá al dirigente opositor venezolano Henrique Capriles, en mayo pasado, provocando la molestia de Maduro, aunque posteriores gestiones de las cancillerías de los dos países solventaron la situación.
El mandatario colombiano, al hacer una declaración ante reporteros desde la ciudad norteña de Sincelejo, dijo además que estaba preocupado por denuncias de deportaciones de colombianos en los últimos días, pero no dio detalles sobre cuántas han ocurrido.
«Hacemos también un llamado para que se respeten los derechos humanos de los colombianos residentes en Venezuela», dijo Santos en sus declaraciones transmitidas en vivo por la página web de la Presidencia. «Vemos con preocupación las recientes deportaciones de colombianos, compatriotas que han denunciado que han sido deportados sin justa causa, dicen ellos que les quitan los documentos y luego los deportan, ahora bien, también, que quede claro, que el único interés que tenemos el presidente, el gobierno y todos los colombianos es la estabilidad y la prosperidad de Venezuela porque estamos inexorablemente unidos, nosotros… queremos a Venezuela, nos duele Venezuela, todo lo que allá sucede bueno o malo repercute aquí en Colombia».
El mandatario, que no respondió preguntas tras su alocución, dijo que «sí como nunca encontraremos las palabras suficientes para agradecerle a Venezuela su contribución a nuestros esfuerzo para alcanzar la paz, nuestros hermanos venezolanos deben saber que estamos siempre, siempre dispuestos a ofrecer nuestro modesto concurso para que también se mantenga la paz en Venezuela».
«Ya basta carajo de abusos»…
En un acto en Caracas, Maduro, visiblemente molesto, condenó una supuesta «guerra» de «violencia psicológica» contra los venezolanos según él orquestada desde el extranjero, y se quejó de los comentario del mandatario colombiano.
«Ya basta carajo de abusos, ya basta de que se metan en los asuntos internos de nuestra patria. Los problemas de los venezolanos los resolvemos los venezolanos», dijo el mandatario venezolano, citando comentarios de Santos. «Me va a venir a dar lecciones a mí de democracia el presidente Santos, cuando yo lo que estoy haciendo es defender a Venezuela, el derecho a la paz de Venezuela «,
Maduro estaba irritado porque «viene el presidente Santos a decir que en Venezuela maltratamos a los colombianos, y que mi gobierno los maltrata y los deporta».
«Nuevamente ha cometido un error usted presidente Santos al dejarse llevar por su corazoncito y su simpatía con los fascistas y la derecha venezolana, que siempre lo llevan directo al voladero de la política internacional», dijo el gobernante venezolano, quien no mencionó si esos comentarios tendrán alguna consecuencia en la relación bilateral.
Maduro se preguntó qué quieren los mandatarios extranjeros, entre los que citó también al presidente chileno Sebastián Piñera, «¿qué quiere Piñera, qué quiere el presidente (estadounidense Barack) Obama, que yo condecore a los enmascarados? (que participan en las protestas)».
AP