El ministro de Interior, Miguel Rodríguez, afirmó hoy que el estado Táchira, donde en los últimos días se han registrado fuertes protestas contra las políticas del Gobierno, se encuentra en calma y que los militares recogieron 180 toneladas de escombros metálicos.
«Estamos ya llevando al orden a este importante estado del país al que todos queremos y al que todos deseamos que llegue otra vez la cordialidad», indicó el titular de Interior a periodistas tras reunirse con los alcaldes tachirenses en San Cristóbal, capital de la región.
Los protestas y actos vandálicos que sufre Venezuela desde hace varios días en contra de las políticas del Ejecutivo han sido especialmente fuertes en este estado fronterizo con Colombia, lo que llevó al presidente Nicolás Maduro a decir que estaba dispuesto a declarar el «estado de excepción» en esa zona del país.
Para hacer frente a la situación, el mismo Rodríguez señaló el jueves que un batallón de paracaidistas y componentes de unidades militares de ingeniería se desplazarían hasta Táchira para reforzar al contingente militar ya presente.
Rodríguez informó de que los equipo de ingeniería, que comenzaron a trabajar anoche hasta primeros horas de la mañana, recogieron un total de 180 toneladas de escombros metálicos.
«Ahí hay postes de luz, hay alcantarillas, alambradas eléctricas, todo tipo de obstáculos metálicos (…) y ya la vialidad está funcionando. He visto bastantes vehículos circulando por la ciudad», afirmó.
Indicó estar dispuesto «inclusive» a pasar a una «segunda fase» que contemplaría una mesa de diálogo con todos los sectores de ese estado para «seguir estructurando» el plan de seguridad en la zona y a la que se sumaría la participación ciudadana como «complemento necesario».
«Esperamos ya que la ciudadanía comience a ayudarnos, que la ciudadanía no vea a la ingeniería militar que está trabajando como un enemigo, no, lo que estamos es limpiando, mejorando el ambiente (…) y sumar, entre todos, el esfuerzo necesario para que esta ciudad vuelva a la normalidad», defendió. EFE