El secretario de la OEA, José Miguel Insulza, conversará hoy con el presidente del Consejo Permanente del organismo, el embajador dominicano Pedro Vergés, sobre la propuesta de Panamá de convocar una reunión de consulta «urgente» de los cancilleres del continente sobre la situación de Venezuela.
Fuentes de la Organización de Estados Americanos (OEA) señalaron hoy a Efe que la petición del Gobierno panameño fue remitida al presidente de turno del Consejo Permanente, que durante este trimestre es el representante de la República Dominicana.
«El presidente del Consejo Permanente lo conversará con el secretario general esta tarde. Cuando tengamos alguna información, la circularemos», apuntaron las fuentes.
Panamá anunció hoy en un comunicado oficial que propuso la «convocatoria urgente de una reunión de consulta» de cancilleres de los países miembros de la OEA, para «considerar» la situación de Venezuela y buscar iniciativas que ayuden a «encontrar una solución a través del diálogo entre venezolanos».
El Gobierno del presidente panameño, Ricardo Martinelli, hizo la solicitud basándose en artículos de la Carta de la OEA y de su Estatuto del Consejo Permanente que «señalan que cualquier Estado miembro puede pedir que se convoque la Reunión de Consulta, con el fin de considerar problemas de carácter urgente y de interés común para los Estados», según el comunicado de la Cancillería.
Venezuela se encuentra sumida en una ola de protestas contra el Gobierno del presidente del país, Nicolás Maduro, desde hace dos semanas, manifestaciones que han dejado trece muertos y 150 heridos, según cifras oficiales.
El Consejo Permanente de la OEA trató por primera vez la situación el miércoles pasado, durante una sesión ordinaria en la que Estados Unidos y Canadá plantearon su preocupación por la violencia en ese país y llamaron al Gobierno de Maduro a dialogar con la oposición.
En esa sesión, el embajador de Panamá ante la OEA, Arturo Vallarino, llamó igualmente al inicio de «un diálogo con el mayor respeto a los valores de la pluralidad de opiniones, la integridad personal y sobre todo los derechos humanos».
En respuesta, el embajador venezolano, Roy Chaderton, atribuyó la violencia en las protestas a una «acción desestabilizadora» contra el Gobierno, orquestada por la oposición con el apoyo de Estados Unidos, y aseguró que dos meses antes de que comenzaran las protestas, Maduro inició un diálogo con la oposición.
El debate coincidió con una manifestación fuera de la sede de la OEA en la que decenas de personas pidieron a Insulza que active la Carta Democrática Interamericana para convocar una sesión extraordinaria del organismo sobre las violaciones a los derechos humanos supuestamente cometidas por el Gobierno de Maduro. EFE