El presidente de la República, Nicolás Maduro, está «a punto de coronar una gran victoria» porque los que desde hace dos semanas provocan focos de violencia en contra de su Gobierno «están aislados», aseguro hoy su ministro de Exteriores, Elías Jaua.
«Estamos a punto de coronar una gran victoria de la paz sobre la violencia, de la vida contra la muerte», afirmó Jaua, al señalar que «cada hora que pasa los focos de los grupos violentos, preparados y entrenados para generar caos (…) y derrocar al Gobierno bolivariano legítimo del presidente Nicolás Maduro, están cada vez más aislados».
Jaua sostuvo en una alocución difundida por el canal estatal de televisión que será «un triunfo más» de la Revolución Bolivariana que arrancó, remarcó, con la revuelta popular de hace 25 años, conocida como «El Caracazo», y «siguió luego» en 1998 con la primera elección de Hugo Chávez y hace diez meses con la de Maduro.
Maduro ha decretado festivo el jueves y viernes próximos en conmemoración de que el 27 de febrero de 1989 comenzó en las barriadas populares de Caracas una revuelta popular en rechazo a las alzas de precios y tarifas exigidas por el Fondo Monetario Internacional (FMI), sofocada a tiros por militares y policías.
El parte oficial de entonces cifró en unos 300 los muertos, mientras versiones de prensa estimaron en hasta 3.000 las víctimas que dejó la represión entre el 27 y 28 de febrero de 1989 durante el segundo Gobierno del entonces presidente, Carlos Andrés Pérez.
«Que no se le olvide a la oligarquía que los únicos que hacen rebeliones populares son los pueblos y este pueblo hizo la del 27 de febrero de 1989», añadió Jaua, afirmando que la población rechaza las «guarimbas (barricadas) limitadas a grandes avenidas».
Jaua dijo que el líder opositor y excandidato presidencial Henrique Capriles, derrotado por Maduro hace diez meses en unas elecciones que denunció como fraudulentas, «no sabe qué hacer», y le exigió que se defina.
«Capriles tiene que definirse. Si su camino es la violencia y la desestabilización, asúmalo», lo exhortó el canciller.
«Nosotros lo asumimos tras la masacre de ‘El Caracazo’ y cuando no nos quedaba sino la rebelión nos incorporamos al comandante Chávez», quien después eligió «el camino pacífico y democrático y lo cumplió hasta el último día de su vida y más nunca optamos por la vía de la violencia», subrayó.
Venezuela ha sido escenario de protestas contra el Gobierno durante las dos últimas semanas con un saldo de 13 personas muertas, 150 heridos y más de siete centenares de detenidos, de los que, según el Gobierno, permanecen 48 en prisión. EFE