El Estado colombiano fue condenado a pagar una millonaria suma por la detención injusta de tres hombres señalados de ser los autores materiales del asesinato en 1989 del dirigente liberal Luis Carlos Galán, se informó el jueves oficialmente.
«Los tres hombres permanecieron detenidos por más de tres años, en diferentes cárceles, sindicados de ser los autores materiales del homicidio con fines terroristas del entonces candidato presidencial y de otras dos personas que lo acompañaban», dijo en una sentencia de 91 páginas el Consejo de Estado, una de las cuatro altas cortes del país.
La indemnización de unos 3.000 millones de pesos (casi 1,5 millón de dólares) favorece a Alberto Júbiz Hasbum, Héctor Manuel Cepeda Quintero y Norberto Hernández Romero o a sus familiares. Júbiz Hasbum falleció de muerte natural en 1998.
Galán fue asesinado el 18 de agosto de 1989 en Soacha, un municipio ubicado a escasos kilómetros al sur de Bogotá. Al momento de su asesinato, según las encuestas de entonces, era el más firme candidato para ganar las elecciones presidenciales de mayo de 1990.
Según el alto tribunal, «tanto la captura de los tres ciudadanos como la investigación adelantada en su contra estuvo fundada sobre múltiples irregularidades que fueron reconocidas, incluso, por la propia Fiscalía… al momento de cerrar el proceso y ordenar su libertad».
La sentencia indicó que «en el presente caso se presentó una grave violación a los derechos de buen nombre y honra de las aludidas víctimas, puesto que fue un hecho notorio a nivel nacional que el propio Estado. sometiera a tales personas al escarnio público y se empecinara en mostrarlas como los directos responsables del magnicidio».
Adicionalmente, según el fallo, el Fiscal General y el Director de la Policía tendrán dos meses para realizar un acto de presentación de excusas públicas a las víctimas y a sus familias «por haber trasgredido sus derechos a la libertad personal, al debido proceso, a la presunción de inocencia y al buen nombre y la honra».
El Consejo de Estado advirtió que la indemnización, una vez que sea pagada por la nación a los tres hombres que injustamente estuvieron en la cárcel, deberá ser reembolsada al erario por los verdaderos autores del montaje: los entonces directores del Departamento Administrativo de Seguridad, general en retiro de la Policía Miguel Maza Márquez, y de la Policía Judicial, general en retiro Oscar Peláez Carmona.
Actualmente Maza Márquez está en prisión como presunto autor intelectual del asesinato de Galán. En los años 80, Maza fue considerado un héroe en Colombia por su lucha contra el narcotráfico. De hecho, el capo Pablo Escobar, muerto por la fuerza pública en 1993, atentó varias veces contra su vida. Maza siempre ha pregonado su inocencia y se ha mostrado ajeno a cualquier responsabilidad en el asesinato de Galán.
Peláez Carmona aún no ha sido objeto de una investigación formal por parte de la Fiscalía.
Por el asesinato de Galán, el 31 de agosto de 2011, la Corte Suprema de Justicia condenó al exministro y exsenador Alberto Santofimio como uno de los instigadores del crimen del dirigente. Según las autoridades, Santofimio instigó a Escobar para que mandara a asesinar al político liberal.
La investigación de la Fiscalía ha dicho que el homicidio de Galán fue el producto de una componenda entre el narcotráfico y un sector de la clase política con la complicidad de un sector corrupto de la fuerza pública. AP