Fueron muchas las medidas económicas que llevaron al “Caracazo”, sin embargo, los analistas políticos coinciden en señalar que el detonante de los hechos ocurridos el 27 de febrero de 1989, fueron producto de una inestabilidad social muy parecida a la que vivimos hoy en día
“Estoy persuadido de que no habrá vacilaciones ni titubeos en el camino que impone la construcción de la Venezuela moderna. Seguro estoy de la comprensión y el esfuerzo unitario, concertado y solidario de todos los venezolanos, sin ningún tipo de discriminación. No los defraudaré, fortaleceré, con mi vocación de servicio y la de mis colaboradores, la confianza que Venezuela ha puesto en mí”.
Estas palabras forman parte del discurso pronunciado, el 16 de febrero de 1989, por el entonces presidente, Carlos Andrés Pérez, en el que informaba, en cadena nacional de radio y televisión, la implementación de un programa de ajustes macroeconómicos que sería promovido por el Fondo Monetario Internacional (FMI). Para muchos, estas palabras fueron el detonante de “El Caracazo”.
Ya han pasado 25 años del llamado “Caracazo”. “Caracazo” porque Caracas se alzó, porque retumba fuerte el recuerdo de un hecho que, para la época, era poco común en nuestras calles, pero que hoy, con menores o mayores intensidades, ha pasado a convertirse en costumbre.
Hoy en día vivimos con el latente temor de un nuevo “Caracazo”, no sólo porque los hechos históricos tienden a repetirse, sino también porque los problemas de aquella época no sólo no se han solucionado, sino que se han intensificado. Por tan sólo citar un ejemplo, en 1999 (10 años después del 27F) en Venezuela se contabilizaban 5 mil 868 venezolanos asesinatos, mientras que el 2013 cerró con 25 mil 763 homicidios.
25 años atrás
Al finalizar los años ´70 Venezuela empieza a vivir una gran crisis económica, causada en gran medida por las políticas económicas generadas durante el primer mandato de Carlos Andrés Pérez, especialmente por el gigantesco endeudamiento con la banca internacional de más de 30 millardos de dólares, que causó un efecto de depreciación de la moneda venezolana.
Durante los mandatos de Luís Herrera Campins y Jaime Lusinchi, esta crisis se agravó, ya que ambos demostraron una total incapacidad para manejarla. Para hacer frente a esta situación, vino Carlos Andrés Pérez en 1989 con una segunda oportunidad al frente de los destinos país, durante la cual propuso implementar un programa neoliberal de transformación de la economía.
A este programa se le conoció con el nombre de “paquete económico”, el cual fue diseñado siguiendo las recomendaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) y bajo la tutela del prestigioso economista Miguel Rodríguez.
Algunas de las medidas tomadas por Carlos Andrés Pérez fueron la privatización de las empresas públicas, reformas fiscales, disminución de aranceles, eliminación de los subvenciones y protección del Estado a empresas privadas, fomento de la descentralización y reducción del tamaño del Estado. Sin embargo, la medida que específicamente originó el “Caracazo” fue el incremento de los precios del transporte público.
Y es que si bien, el “paquete económico”, contaba con el apoyo de quienes venían en él la única forma de salvar la economía del país, el proceso de cambio fue muy drástico y afectó bruscamente a los sectores más desfavorecidos de la población, quienes no dudaron en defenderse de lo que ellos consideraron un ataque contra los más pobres.
Tomando las calles
Las protestas se iniciaron en Guarenas la mañana del 27 de febrero de 1989. Rápidamente, se extendieron a la capital y otras ciudades del país. Ya en la tarde había problemas en casi todos los barrios de Caracas, los comercios habían cerrado sus puertas y el transporte público no prestaba servicio.
En los días siguientes, los medios de comunicación mostraron imágenes que permiten ver la intensidad de los saqueos. Durante muchos meses, se discutió cómo pudo acontecer algo tan violento en Venezuela.
Desbordado por los saqueos, el Gobierno Nacional declaró el estado de emergencia, militarizó la ciudad y aplastó las protestas con violencia desmesurada. Las cifras de fallecidos oscilaron entre 400 y 2 mil civiles. La represión fue especialmente dura en los barrios pobres y cerros de la capital.
El Poder Legislativo suspendió las garantías constitucionales para tratar de controlar la situación. Durante varios días, la ciudad de Caracas vivió sumida en el caos, rodeada de características poco comunes como restricciones, escasez profunda de alimentos, militarización de las calles, allanamientos políticos, persecuciones y el asesinato de personas inocentes.
La consecuencia evidente del “Caracazo” fue la inestabilidad política que aun hoy vivimos. El programa neoliberal que intentaba implementar Carlos Andrés Pérez fue drásticamente modificado y el popular “Gocho” fue acusado de corrupción y apartado de la silla de Miraflores antes de culminar su mandato presidencial.
Nació en Guarenas
Fueron muchas las medidas económicas que llevaron al estallido social que se originó en Guarenas el 27 de febrero de 1989, a menos de un mes de iniciarse el segundo mandato de Carlos Andrés Pérez, no obstante, la chispa que encendió al país fue el aumento de la gasolina, que trajo como consecuencia el incremento del pasaje del transporte público.
Edda Pujadas // Twitter: @epujadas