Poco después de que el Rey Momo asumiera un nuevo reinado comenzaron a desfilar por diferentes calles de la ciudad las primeros comparsas
El rey Momo, personaje tradicional que encarna el carnaval, recibió hoy las llaves de la ciudad de Río de Janeiro de manos del alcalde, Eduardo Paes, y dio el pistoletazo de salida a cinco días de fiesta en la ciudad brasileña.
La ceremonia, que tuvo lugar en el Palacio de la Ciudad, una de las sedes de la alcaldía de Río de Janeiro, se transformó en una fiesta cuando el monarca hizo su aparición a lomos de un vehículo de alta gama acompañado de la reina del carnaval de este año, Letícia Martins Guimarães, y de las princesas Clara Cristina Paixão de Oliveira y Graciele Souza Ferreira.
Tras recibir las llaves, el rey Momo, con una corona calada con forma de balón en su base y un impoluto traje blanco, declaró abierta «la mayor fiesta cultural y popular del Planeta»
«Declaro abierto el Carnaval de la Ciudad Maravillosa de Río de Janeiro ¡Está decretada la alegría!», bramó para alborozo de sus súbditos.
El soberano fue jaleado al grito de «Evoé», tal y como era saludado el rey de la Diversión en la antigua Roma, donde las fiestas báquicas dieron origen a la de carnaval.
Precedido por dos saltimbanquis sobre zancos que hicieron una exhibición de samba a más de dos metros de altura, el rey Momo recibió las llaves de manos del alcalde, que se arrodilló ante la magna presencia del monarca.
Paes bromeó sobre la necesidad de que el soberano sepa gestionar los problemas de tráfico que asuelan la ciudad brasileña desde hace semanas por el cierre de diferentes vías y diferentes obras públicas.
Asimismo, señaló que Río es «la ciudad más maravillosa de todas las ciudades y la más alegre», y pidió que durante que la fiesta de carnaval «los cariocas pueden divertirse» y celebrar con jolgorio.
«Que la ciudad pueda mostrar una vez mas a todo Brasil y el mundo toda su fuerza, toda su energía y toda su alegría», concluyó.
El alcalde, con un sombrero Panamá, fue el primero en sumarse a la alegría de estos días bailando junto a las comparsas allí reunidas y arrodillándose en varias ocasiones ante las princesas del carnaval que bailaron a su alrededor.
En la ceremonia no faltaron los acordes de la canción «Cidade Maravilhosa», considerada como un himno oficioso de Río de Janeiro, ante cuyas notas los presentes pusieron la mano en el corazón y esbozaron una sonrisa.
Poco después de que el Rey Momo asumiera un nuevo reinado comenzaron a desfilar por diferentes calles de la ciudad los primeros «blocos» (comparsas) programados para este carnaval.
Agencias