Revisarnos y perdonarnos, claves para la paz

De lograrse una mayor comprensión de lo que ocurre, el nivel de conciencia colectiva será de tal magnitud que facilitaría corregir grandes distorsiones que existe en Venezuela, incluyendo temas tan álgidos como el precio de la gasolina, el dólar, las tarifas eléctricas y la de los servicios de transportes masivo del Estado

 

Miguel Pérez Abad

 

El clamor nacional por la paz, vivido y sentido en la Conferencia por la Paz instalada en el Palacio de Miraflores, en días pasados, nos hace reiterar la necesidad de abrir los espacios para el diálogo, como lo hizo el presidente Nicolás Maduro en ese acto, donde permitió -en cadena nacional-, que muchos actores y sectores de la vida nacional se expresaran sin mas limitaciones que el mínimo respeto que debemos tener con nuestros semejantes.

 

Fue un ejercicio interesante, que nos reafirma la imperiosa tarea de continuar abriendo espacios de diálogos productivos por la transformación de los valores. Y esto será posible solo si los blancos, los rojos, los verdes y los azules no encontramos en un esfuerzo compartido para construir la Venezuela productiva y de paz que merecemos. Vamos a quitarnos la camisa del color que representamos y forrémonos con la bandera de Venezuela.

 

Para construir la paz en el país es necesario revisar las creencias y valores propios. Para construir la paz será necesario perdonarnos nuestros errores. No podemos seguir viviendo en el pasado de la Cuarta República y construir la Sexta sobre la base de la destrucción de la Quinta. El país espera mucho más de la dirigencia, hay que aislar a los violentos.

 

Es menester apalancar a la industria venezolana y extranjera para trascender y construir el socialismo productivo. Los empresarios del país debemos abrir espacios para trabajar por el pueblo. Desde la llegada de la Revolución Bolivariana, la producción en el país paso de 17 mil millones a 42 mil millones de dólares al año.

 

El esfuerzo y el ejercicio de experimentado en la instalación de la Conferencia por la Paz, obliga a  la creación de una comisión que le de continuidad al diálogo de paz.

 

La propuesta del Presidente Ejecutivo de Empresas Polar, Lorenzo Mendoza, para la creación de una comisión nacional de la verdad económica y que tuvo una acogida por el Presidente de la República, Nicolás Maduro, puede ser otra experiencia enriquecedora para que la mayoría del pueblo entienda, sin manipulaciones (producto de la polarización), sin verdades a medias, sin tantos estereotipos, lo que ocurre en la economía venezolana.

 

De lograrse una mayor comprensión de lo que ocurre, el nivel de conciencia colectiva será de tal magnitud que facilitaría corregir grandes distorsiones que existe en Venezuela, incluyendo temas tan álgidos como el precio de la gasolina, el dólar, las tarifas eléctricas y la de los servicios de transportes masivo del Estado.

 

 

Salir de la versión móvil