Ante la posibilidad de que el campocorto venezolano Asdrúbal Cabrera cambie de equipo en la temporada del 2015, o antes, los Indios de Cleveland ya tienen a su sucesor: Francisco Lindor
Los Indios de Cleveland llegan al entrenamiento primaveral con una situación clásica de un jugador importante presionado por uno de los principales prospectos. Asdrúbal Cabrera es un exparticipante del Juego de Estrellas que ha sido el parador en corto titular del equipo las últimas cinco temporadas. Francisco Lindor es uno de los principales prospectos -el sexto mejor prospecto del beisbol, de acuerdo a Keith Law de ESPN-, pero solamente tiene 20 años y únicamente ha jugado en 21 partidos en Clase A, como la categoría más alta a la que ha llegado. El plan para Lindor probablemente sea darle media temporada de juego en las menores antes de siquiera pensar en promoverlo a Grandes Ligas. Pero hay bastantes razones por las que empujarlo hacia Grandes Ligas para el día de apertura y cambiar a Cabrera es el movimiento correcto para Cleveland.
La mayoría de los prospectos necesita bastante preparación para madurar, pero Lindor se perfila como un jugador que es capaz de hacer un ascenso rápido.
Primero, ya juega defensiva con calidad de Ligas Mayores. Las proyecciones varían, pero concuerdan en que será un activo valioso. Eso es importante, en particular debido al plan de convertir a Carlos Santana en tercera base. Lindor también es el tipo de bateador que no se basará en poder para tener éxito. Aunque su poder quizá surja posteriormente, Lindor tiene el suficiente ojo bateador para lograr buenos turnos en las Mayores desde ya.
En su carrera de ligas menores, recibió 111 bases por bolas contra solamente 129 ponches, y la temporada pasada recibió más pasaportes (49) que ponches (46). Eso es algo muy importante.
Como una referencia, solamente cuatro bateadores calificados hicieron eso en las Mayores la temporada pasada. Y aunque las proyecciones de Lindor son modestas -sus tres proyecciones en FanGraphs tienen un wRC+ que va de 78 a 89-, de hecho están al mismo nivel que el promedio de la liga. La temporada pasada, los torpederos de Grandes Ligas promediaron apenas 85 de wRC+, con los paradores en corto de la Liga Americana un paso abajo, con 84. Combinar una producción ofensiva al mismo nivel que el promedio de la liga, pero con defensiva superior, es pensar en un pelotero como el también venezolano Elvis Andrus, quien ha sido uno de los mejores en las últimas cinco temporadas en Grandes Ligas. Y si Lindor puede batear como se le ha proyectado, tendrá la oportunidad de ser inmediatamente un pelotero de cuatro victorias.
Siempre existe la oportunidad de que no batee de inmediato, pero con Terry Francona, Lindor tendría a un mánager empático, ya que Francona se ha topado con esta situación antes.
En 2007, los Medias Rojas intentaban volver a la postemporada luego que la campaña 2006 los dejó con un sabor amargo en sus bocas. El equipo estaba instalando al ampliamente elogiado novato Dustin Pedroia en la segunda base, y tuvo un inicio demasiado lento. Para finales de abril, bateaba .182/.308/.236, y comenzaron los clamores frecuentes para remover a Pedroia. Pero Francona se aferró a él, y llegó a batear .333/.389/.467 el resto de la temporada, ganando el premio de Novato del Año y ayudó a que los Medias Rojas ganaran su segundo trofeo de Serie Mundial en cuatro años. Esta no es una predicción de que existirá una situación similar involucrando a Lindor, pero el punto es que Francona tiene la mano firme para ayudar a guiar a un pelotero joven durante los baches.
Los líos de Cabrera
Y caer en baches fue lo que Cabrera hizo durante la mayor parte de la temporada 2013. De 2009 a 2012, Cabrera logró un wRC+ de 110, que fue el quinto mejor entre los torpederos elegibles. Sus estadísticas quizá hubieran sido mejores si una fractura en el antebrazo no hubiera afectado su temporada 2010. Pero la temporada pasada, sus números fueron en picada. Logró un wRC+ de apenas 95, y hay pocos motivos para creer que volverá al nivel de 2011, cuando obtuvo un wRC+ de 119, el mejor de su carrera.
La primera razón: sus estadísticas de disciplina al plato. Sus porcentajes de swings han ido a la alza en años recientes, al punto que hace el a un número de lanzamientos por encima del promedio. Eso estaba bien cuando podía hacer contacto con un porcentaje por encima del promedio, pero el año pasado su porcentaje de contacto bajó en más de 4 por ciento, al punto de que en esencia, estaba al promedio de la liga. Y se equivoca de forma pareja, ya que su promedio de contacto disminuyó tanto en lanzamientos dentro como fuera de la zona de strike, y su porcentaje de «Z-Contact» (pelotas dentro de la zona de strike) estuvo ligeramente por debajo del promedio la temporada pasada.
El declive ofensivo no sería problema si colaborara positivamente en otras áreas, pero no lo está haciendo. Cabrera ha ido en declive como corredor. Su bases robadas ha ido a la baja en cada una de las últimas cinco temporadas, de 3.4 en 2009 a -2.6 la campaña anterior. Y nunca ha sido alguien con defensiva superior. En las últimas tres campañas, se clasifica como el tercer peor torpedero en DRS (carreras salvadas a la defensiva), y el peor de todos en UZR/150 (promedio de zona por cada 150 juegos). El segundo realmente pone en perspectiva qué tan malo ha sido Cabrera. No es una medida acumulable, pero es puesta en escala de una temporada de 150 partidos, y con esa medida, Cabrera es por mucho el peor torpedero defensivo: más de siete carreras peor que el antepenúltimo lugar.
El cuadro interior
La defensiva dentro del cuadro será especialmente importante para los Indios esta temporada por un par de razones. Primero, sus pitchers abridores fuera de Justin Masterson presentan una variedad de interrogantes, y Masterson es un dínamo que induce a los roletazos. Los Indios necesitarán un parador en corto sólido a la defensiva, y solamente Lindor es capaz de hacer eso. Además, como se indicó previamente, los Indios tienen un plan para convertir a Santana en un antesalista. Santana probablemente no pasará la mayor parte de su tiempo ahí, pero incluso 50 partidos donde el lado izquierdo del cuadro está conformado por un exreceptor y un errático campocorto podría provocar secuencias de pesadilla.
La transición de Santana a la esquina caliente podría ser más suave, si tuviera a Lindor cubriéndolo en el hueco entre segunda y tercera.
Parece el momento
Asdrúbal Cabrera se convertirá en agente libre al final de la temporada, y hay muy pocas posibilidades de que los Indios lo firmen de nuevo. Ellos quizá tengan el lujo de esperar hasta que la fecha límite de «non-waiver» para cambiarlo, pero si fracasa desde un inicio, quizá tengan que cortarlo y terminar con todo. Ahorita, tiene antecedentes sólidos, que alimenta las proyecciones de una campaña de regreso. Si es cambiado, existe el riesgo de que se reponga y tenga una buena temporada, pero al ser un equipo de mercado pequeño, los Indios necesitan ser agresivos acerca de deshacerse de jugadores antes de que estos lleguen a su fecha de caducidad. Y cambiarlo es un movimiento que se facilita por el hecho de que tienen a un prospecto esperando. Equipos como los Dodgers, Mets y Yankees tienen problemas en la parte media del cuadro, y quizá estén dispuestos a deshacerse de un prospecto de segundo nivel a cambio de Cabrera. Y ya sin el peso del sueldo de $10 millones de Cabrera pesando en la nómina, los Indios tendrían la flexibilidad para mejorar su rotación a mitad de campaña, si no tienen suerte con alguno de sus candidatos a ser quinto abridor.
Nunca es fácil deshacerse de un jugador, pero los días de Cabrera en Cleveland están contados, y Lindor básicamente está listo para Grandes Ligas. Canjear a Cabrera e instalar a Lindor traería flexibilidad en la nómina y mejoraría la defensiva del equipo drásticamente, y el desplome ofensivo comparado a la temporada pasada sería mínimo. Law lo resumió perfectamente en su perfil de Lindor este invierno: «No estoy seguro qué le falta aprender a Lindor para que esté listo y se adueñe de la posición en Cleveland».
Se requiere una organización agresiva para hacer ese movimiento, pero unos Indios que pertenecen a un mercado pequeño necesitan ser agresivos si quieren volver a la postemporada.
Paul Swydan
espndeportes.com