La crisis que vive el centro de salud alcanzó su máxima expresión: falta de insumos, equipos, déficit de camas, bajos sueldos, quirófanos y ascensores dañados, inseguridad y violencia entre otras carencias, son algunas de las problemáticas
Residentes del Hospital Clínico Universitario de Caracas denuncian que la institución está trabajando a menos de la mitad de su capacidad.
Denys Guedes, delegado de Hospitales y Clínicas, relató que, “el hospital vive una situación bastante crítica, por lo que nos hemos reunido con el gremio de médicos para tratar la problemática existente. Médicos hay, lo que no hay son recursos para atender a los pacientes, es por esto que se suspendieron consultas por falta de material”. También agregó que, “se está trabajando con las uñas porque muchas de las áreas están inhabilitadas, hay problemas tanto en cocina, como en quirófanos”, señaló.
Trabajadores indicaron que la falta de recursos básicos como algodón, alcohol, jeringas, gasa, guantes, pasan por desapercibido en este centro hospitalario. “La situación es tan caótica que la mayoría de los médicos indican a los pacientes los materiales que deben traer para ser atendidos”, agregaron.
Promesa incumplida
La promesa por parte de las autoridades de dotar y mejorar los hospitales es una constante. El 30 de septiembre del año 2007 el expresidente Hugo Chávez anunció que se construirían seis nuevos hospitales y no se cumplió. Los recursos asignados y los créditos adicionales otorgados para su reimpulso se consumieron en su totalidad. Sin embargo, afectados aseguran que la situación no ha cambiado como se esperaba.
Profesionales de la medicina, empleados y pacientes se unen en una sola voz y hacen un llamado a las autoridades correspondientes para que atiendan la crisis hospitalaria y asuman el compromiso de reforzar la seguridad del hospital que, además de todas las carencias, se encuentra azotado por el hampa.
En total deterioro
Trabajadores del Hospital Clínico denunciaron escasez de suplementos en el área de cocina, “por los momentos no hay máquina para esterilizar las bandejas de comida y los carros donde se lleva la comida están dañados”.
Por su parte Yorkis Villegas, cocinera, reportó irregularidades en el abastecimiento alimenticio empleados para atender a pacientes con regímenes dietéticos especiales, como diabéticos o con problemas de malnutrición. “Hacemos todo lo posible para cumplir las dietas de los pacientes, alimentos primordiales como el Ensure no lo hay, y este se le daba a los pacientes diabéticos y con problemas renales, por ahora sólo garantizamos la comida nada más”.
También agregó que de cuatro cocineras, sólo están laborando dos. “Las otras compañeras están enfermas debido al peso que hay que hacer para cargar la comida”. En cuánto a los implementos de limpieza, señalaron que les facilitan una sola jarra de jabón, el cual tienen que utilizarlo mínimo 15 días.
Salas se están agotando
Explicaron los afectados que se ha tenido que paralizar los procedimientos quirúrgicos por insuficiencias del material médico.
“De 14 quirófanos sólo están funcionando cuatro, y el director nos dice que van a resolver pero no da respuesta, no hay compresas, no hay jeringas, y en terapia es horrible, no hay ni una bata de protección para aspirar a los pacientes”, indicaron los trabajadores.
También indicaron que “hay demasiada falta de insumos, actualmente se les pide material a los pacientes, y se supone que los servicios son gratuitos pero es mentira, aquí al paciente le toca que comprar su kit para que sea atendido”.
Médicos y trabajadores exigen a la directiva la dotación de equipos de emergencia para que los ciudadanos sean atendidos. “Pedimos al doctor España para que se pronuncie y dé soluciones ante esta situación, muchos pacientes se molestan como también muchos entienden la situación que estamos pasando y lamentablemente hay que decirles a los pacientes que no hay insumos”.
Falla la emergencia
Trabajadores se encuentran preocupados debido a que hay días en que la sala de urgencias no cuenta con recursos para atender. “No hay sillas de rueda, las que tenemos están dañadas y de paso no hay camillas”, aseguraron los empleados.
Indicaron que desde hace tres años padecen por la falta de emergenciólogos pero la situación se ha agudizado en los últimos meses. “Los especialistas han emigrado a centros privados y no hay residentes tampoco, cuando deberían haber 16 por lo menos”.
Talleres en el olvido
José Briceño, Delegado de equipo de talleres, aseguró que el área de talleres también esta siendo afectada y se encuentra en completo abandono. “No tenemos herramientas para trabajar, no hay material, no tenemos nada, incluso un electrodo tuvo que comprarlo un compañero para soldar un carro de la cocina”, aseguró.
También reveló que los baños como el cuarto de los camilleros son “caóticos”, y así como compañeros han denunciado que no hay gasas ni recursos básicos, “nosotros no tenemos colchonetas ni camas para el descanso”, aseguró.
Shirley Zambrano/ LaVoz
