Los alcaldes de los municipios Baruta y El Hatillo dijeron hoy que no reprimirán las protestas con barricadas en las calles que desde hace un mes protagonizan sectores opositores al Gobierno del presidente Nicolás Maduro, en respuesta a un fallo judicial que les ordena despejar las vías.
«Si piensan que con estas acciones van a encajonar a los alcaldes del país a que seamos represores de manifestaciones, le decimos no cuenten con nosotros», dijo el alcalde de Baruta, Gerardo Blyde, según declaraciones reproducidas en un comunicado del municipio.
Tanto Blyde como su par de El Hatillo, David Smolansky, reiteraron que el derecho a protestar de manera pacífica está consagrado en la Constitución y volvieron a condenar los hechos de violencia que se han generado al término de algunas de las masivas manifestaciones que desde hace un mes se repiten en el país.
Smolansky consideró además que «cuando escuchen nuestros alegatos», el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) suspenderá la medida, que ordena a ambos alcaldes que «realicen las acciones y utilicen los recursos materiales y humanos necesarios, a fin de evitar que se coloquen obstáculos en la vía pública».
«Lo que esta sentencia busca es que uno como alcalde nos enfrentemos a los vecinos. Yo jamás me enfrentaré a los vecinos del municipio El Hatillo», dijo Smolansky en una rueda de prensa.
La Sala Constitucional del TSJ ordenó a los alcaldes que procedan «a la inmediata remoción de tales obstáculos y se mantengan las vías y zonas adyacentes a éstas libres de residuos y escombros y de cualquier otro elemento que pueda ser utilizado para obstaculizar la vialidad urbana».
El presidente Maduro ha reiterado en las últimas semanas las acusaciones a los alcaldes de cuatro de los cinco municipios de Caracas, que están en manos de la oposición, por considerar que no hacen nada contra las denominadas «guarimbas» o barricadas montadas por vecinos y grupos radicales para protestar contra el Gobierno.
Venezuela está inmersa en un oleada de protestas desde hace un mes que han dejado hechos de violencia con un saldo de 28 muertos muertos, cientos de heridos y más de un millar de detenidos
Desde que el 12 de febrero pasado una marcha de estudiantes y opositores terminara en violencia, los municipios de Caracas gobernados por la oposición no han dejado de protestar con barricadas y cacerolazos en las que se expresan sus reclamos contra el Gobierno, bloqueando en algunos casos las vías de acceso.EFE
