Estos nuevos conflictos coinciden con los choques intensos que se desarrollan en la estratégica ciudad siria de Yabrud, al norte de Damasco, cuyo control ha recuperado el régimen de Bachar al Asad
BEIRUT.Al menos 12 personas han muerto y 57 han resultado heridas en los enfrentamientos entre suníes y alauíes que se suceden desde el jueves en la ciudad de Trípoli, en el norte del Líbano, informó ayer domingo la agencia oficial del país, ANN.
El Ejército anunció ayer en un comunicado que uno de sus soldados murió anoche cuando grupos armados arrojaron una granada a uno de sus vehículos en el área de Malule, donde otro ataque con un obús causó seis heridos entre sus filas.
El jueves pasado comenzaron estos enfrentamientos entre los vecinos de los barrios rivales de Bab el Tebaneh, de mayoría suní y simpatizante de los rebeldes sirios, y Yabal Mohsen, de predominio alauí, secta a la que pertenece el presidente sirio, Bachar al Asad.
Los habitantes de Bab el Tebaneh se manifestaron anoche para protestar contra el deterioro de la seguridad, mientras que los responsables de Trípoli continúan reunidos para seguir la evolución de la situación, informaron medios del país.
La tensión en el norte del Líbano tiene como trasfondo la guerra en Siria, ya que la población está dividida entre partidarios y adversarios del régimen de Damasco.
Estos nuevos enfrentamientos coinciden con los choques intensos que se desarrollan en la estratégica ciudad siria de Yabrud, al norte de Damasco, cuyo control ha recuperado el régimen de Bachar al Asad, según informó ayer la agencia siria de noticias, Sana.
Medios libaneses informaron de que un millar de combatientes rebeldes de esta ciudad están huyendo a la región de Arsal, de mayoría suní, en el noreste del Líbano, y favorable a la oposición siria.
Desde el inicio del conflicto sirio, en marzo de 2011, la seguridad se ha deteriorado en el Líbano con un aumento de enfrentamientos sectarios, atentados terroristas y bombardeos en zonas fronterizas.
AP