*** Su vida será hoy y siempre el mejor ejemplo de un hombre que siempre pensó que la disciplina y el honor eran su mejor recompensa, algo que debe servir como una muestra de vida para la juventud y para todos los hombres y mujeres del mundo
Hay que resaltar, que entre los montajes más hermosos que se conoció para la época lo constituye la caracterización del primer actor Enrique Benshimol, en el personaje de «el Rubio», en el drama de tres actos “La Rubiera”, de Ida Gramcko, primer premio Ateneo de Caracas. En esa producción compartió con actores de la talla de Esteban Herrera, Bertha Moncayo, Edmundo Larra, María Gámez, Rosalía Romero, Mayra Chardiet, Carmen Palma y Rafael Cabrera, todos bajo la batuta de Horacio Peterson. La temporada 1958 se realizó en el Teatro Nacional.
Hamlet e inauguración
de la Anna Julia Rojas
Así continuaron un sinnúmero de obras de gran calidad que encabeza la obra “Hamlet”, pieza teatral que inaugura la “Sala Anna Julia Rojas”, ubicada en la Quinta Ramia, primera sede concedida en comodato al Ateneo de Caracas, hecho llevado a cabo en el año de 1960. Después continuaron: “Romeo y Julieta” de William Shakespeare; Rómulo el Grande” de Friedrich; “Las Brujas de Salem”, de Arthur Miller; y el 07 de Abril de 1961, un gran acontecimiento teatral se escenificaba en Caracas con ocasión del estreno de Rinocerontes”, del autor dramático rumano-francés Eugene Ionesco, en el Teatro Nacional, con un elenco de primeras figuras como Esteban Herrera, Bertha Moncayo, Edmundo Larra, Carmen Mesutti, Gustavo Franklin, Humberto Buenocore y Enrique Benshimol, acompañados por un nutrido grupo de alumnos del ateneo, entre los cuales se encontraban Andrés Martínez y Hermán Vallenilla. La puesta en escena fue de Horacio Peterson.
Otras presentaciones
Es imprescindible mencionar su magistral interpretación de “La Vida Pasión y Muerte de Nuestro Señor Jesucristo”, interpretando el rol de Jesús de Nazaret, debido al éxito obtenido en su primeras presentaciones en la ciudad de Caracas, que se hicieron en la Semana Santa, hubo de ser llevada al interior en fechas distintas a la semana mayor.
De sus puesta en escena hay muchas anécdotas, pero bastara con narrar una de ellas para entender la fortaleza de este gran actor como lo fue Enrique Benshimol: Sucedió en el hoy desaparecido Teatro Caracas, que se encontraba en la parroquia de La Candelaria, se llevaba la escena donde Marcos, el Jefe de La Centuria Romana, azotaba a Jesús, cuando de repente una señora que se encontraba en el publico subió al escenario y a taconazos retiro a Marcos de donde se encontraba actuando y le decía a llanto vivo “Como te atreves a pegarle a Nuestro Señor Jesucristo”.
Como comentemos al principio la falta de información sobre la ejemplarizante vida artística de Enrique Benshimol no se ha podido completar, pero si hay hechos sueltos que debemos agregar, como lo es su participación en diferentes películas del naciente cine venezolano y la participación de una película española, rodada en Madrid, llamada “Pelusa”, junto a Marujita Díaz y el actor venezolano Espartaco Santoni.
Su gran sueño
Como maestro siempre soñó con fundar una Escuela de Arte con el fin de formar valores artísticos y poder conceder becas a jóvenes de escasos recursos económicos, un hecho logrado y que él mismo financio con sus propios recursos, nos referimos al “TEA”, Teatro, Escuela y Arte, de la cual tuvimos el honor de ser alumno. El tiempo dio sus frutos y dicha escuela fue el gran semillero de los que ocuparon a posteriori los mejores sitiales de nuestro teatro, radio, televisión y cine venezolano, muchos de los cuales hoy son primerísimas figuras del arte nacional
El teatro, escuela y arte, que por petición de sus alumnos debería llamarse Teatro, Escuela y Arte Enrique Benshimol, realizo con su nuevo nombre una exitosa gira por Suramérica llevando el teatro y el folclor venezolano y visitando los países de: Bolivia, Ecuador y Perú, cosechando grandes aplausos del público y las críticas favorable de los mejores medios de comunicación social de los países visitados.
Recordemos también algunas de sus numerosas actuaciones en la televisión venezolana tales como lo fueron: Anecdotario, un espacio donde se presentaban obras de teatro, en Doña Bárbara, Gómez, La hija de Juana Crespo etc., y en las diferentes radionovelas que se presentaron a lo largo de tiempo en nuestra radio venezolana y que lo llevo a convertirse en la voz masculina de mayor prestancia de la época, esa voz llego a millares de hogares, convirtiéndose en una institución que ha sido muy difícil de igualar. Los críticos opinan que sería difícil hablar de la radio en Venezuela sin mencionar su nombre.
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Dos hechos históricos
Si bien es cierto que le correspondió el gran honor de inaugurar, la primera sala de teatro, “Sala Anna Julia Rojas”, del Ateneo de Caracas, cuando le tocaba, también, inaugurar la nueva sede para la “Sala Anna Julia Rojas”, en la nueva casa del Ateneo y habiendo concluido el ensayo general de la obra “La Gaviota”, realizado para los estudiantes de las diferentes escuelas de teatro de Caracas que llenaban la sala y donde su actuación fue ovacionada, escuchándose el clamor de haber hecho el mejor personaje de su vida, Enrique Benshimol se dirige a su compañera de trabajo Dilia Guacaran y le dice: “Dilia ya puedo morir tranquilo, logré mi sueño interpreté a Chejov y he dado mi mejor clase magistral”. Frase profética se retiró a su casa y al no presentarse a la función del estreno, todo el elenco se preocupó y fueron a buscarlo y lo encontraron sin vida.
Enrique Benshimol vivió y murió para el arte y logró sus metas, ser un excelente maestro, actor y ciudadano. En su honor, el director de “La Gaviota”, Carlos Giménez –fundador del legendario grupo de teatro Rajatabla-, el día 9 de mayo de 1983, concluido el sepelio de Enrique procedió a dar inicio a la función siendo el mismo el encargado de leer el personaje que habría de interpretar Benshimol, dando así por inaugurada la “Sala Anna Julia Rojas”
Un Domingo con Salomón
Salomón Benshimol
sbenshimol@yahoo.com