El gobierno estadounidense busca el visto bueno de ambos líderes para presentar antes del final de abril un documento marco que siente las bases de un futuro acuerdo de paz definitivo, tras casi 8 meses de conversaciones entre ambas partes que han deparado pocos avances
WASHINGTON. El presidente estadounidense, Barack Obama, recibirá hoy lunes al presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abás, en medio de una escalada de tensión en Gaza que puede obstaculizar el objetivo de Washington de finalizar el próximo mes un acuerdo marco para el proceso de paz.
El acto será en la Casa Blanca apenas 2 semanas después de haberse reunido, también en el Despacho Oval, con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, a quien advirtió de que ha llegado la hora de tomar «decisiones complicadas» para impulsar las negociaciones de paz directas con los palestinos.
El gobierno de Obama busca el visto bueno de ambos líderes para presentar antes del final de abril un documento marco que siente las bases de un futuro acuerdo de paz definitivo, tras casi 8 meses de conversaciones entre ambas partes que han deparado pocos avances.
En ese escenario se coló la pasada semana un nuevo brote de violencia, a raíz del lanzamiento -por parte del grupo islamista Yihad Islámica- de unos 50 cohetes desde Gaza al sur de Israel. El ataque no causó víctimas pero recibió una respuesta inmediata de la artillería y la aviación israelíes.
En un comunicado, la Yihad Islamica aseguró que los cohetes tenían como objetivo principal vengar la muerte de tres de sus miembros alcanzados un día antes por la aviación israelí cuando trataban de disparar proyectiles de mortero.
Crisis se mantiene desde 2002
La nueva espiral de violencia, sin parangón desde noviembre de 2012, pareció calmarse a finales de la semana gracias -en parte- a los esfuerzos de mediación de Egipto, pero el viernes volvieron a registrarse nuevos ataques de cazabombarderos israelíes en Gaza en represalia por el lanzamiento de 8 cohetes desde esa Franja.
Abás aseguró el jueves que sigue comprometido a continuar con sus «esfuerzos para alcanzar una solución política y la paz», pero la escalada prebélica ha dejado un claro poso de tensión entre los líderes israelíes y palestinos en un momento crucial para las negociaciones de paz mediadas por Estados Unidos.
En estos días se han producido tres asesinatos a sangre fría en Cisjordania y tres en Gaza, y no hemos escuchado ni una sola disculpa de Israel. Condenamos la agresión militar y los ataques israelíes al igual que el lanzamiento de cohetes», indicó Abás el jueves desde Belén (Cisjordania).
Tanto a Israel como al movimiento islamista Hamás, que controla Gaza, les conviene que la ofensiva de la Yihad Islámica no vaya a mayores, pero el Gobierno israelí ha insistido en que seguirá atacando esa Franja palestina si no hay calma en su territorio.
En ese contexto, es probable que Obama inste a mantener la calma y trate de centrar el debate en las conversaciones de paz, que en un principio debían concluir con un acuerdo a finales de abril.
Dadas las enconadas posiciones de ambos lados, Estados Unidos se ha visto obligado a admitir que ese plazo es irrealizable y su secretario de Estado, John Kerry, ha extendido ya el periodo de negociación sin fecha límite.
AP