El maletero se abrió, la mujer cayó de la patrulla y parte de su ropa quedó presa al vehículo
RÍO DE JANEIRO. La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, lamentó ayer la muerte de una mujer que no resistió a las graves heridas sufridas al ser arrastrada por una patrulla de la policía y aseguró que se trata de un caso que «impactó al país».
La víctima, identificada como Claudia da Silva Ferreira, de 38 años, resultó accidentalmente herida este domingo en medio de un tiroteo ocurrido en Río de Janeiro y tres policías que pasaban por el lugar la colocaron en el maletero del vehículo policial para llevarla a un hospital.
En medio del camino, sin embargo, el maletero se abrió, la mujer cayó de la patrulla y parte de su ropa quedó presa al vehículo, por lo que fue arrastrada durante unos 250 metros hasta que los policías percibieron lo ocurrido.
La mujer, tiroteada en la cabeza y el pecho, sufrió otras heridas al ser arrastrada, que agravaron su estado, y llegó sin vida al hospital al que era trasladada.
Todo el incidente fue grabado en un vídeo por vecinos que seguían al vehículo policial y cuyos bocinazos y gritos ayudaron a alertar a los policías de la caída de la mujer.
«Claudia da Silva Ferreira tenía cuatro hijos, veinte años de casada y se despertaba de madrugada para trabajar», indicó Rousseff en Twitter.
Agregó que «la muerte de Claudia impactó al país» y manifestó, «en esta hora de tristeza y dolor», su «solidaridad» a la familia y amigos de la víctima.
Los tres policías que trasladaron a la mujer han sido detenidos y las autoridades han informado de que pueden ser destituidos y procesados por la forma en que intentaron socorrer a la mujer.
Agencias