La obtención de material nuclear con capacidad para componer un arma -HEU o plutonio- supone el mayor desafío para los grupos extremistas
HOLANDA. Líderes mundiales pidieron el martes a los países minimizar sus reservas de combustible nuclear enriquecido para ayudar a impedir que miembros de grupos extremistas como Al Qaeda consigan material para fabricar bombas atómicas.
En la tercera cumbre de seguridad nuclear desde 2010, dirigentes de 53 países -entre ellos, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y su par ruso, Vladimir Putin- dijeron que se habían realizado avances en los últimos cuatro años.
Pero también dejaron claro que quedan por delante muchos desafíos y subrayaron la necesidad de un aumento en la cooperación internacional, para asegurar que el uranio altamente enriquecido (HEU, por su sigla en inglés), el plutonio y otras sustancias radiactivas no caigan en manos equivocadas.
Estados Unidos y Rusia dejaron de lado sus diferencias sobre Crimea para respaldar el comunicado final, destinado a reforzar la seguridad nuclear en todo el mundo, junto con otras grandes potencias atómicas como China, Francia, Alemania y Gran Bretaña.
Obama dijo que la decisión de Ucrania de remover todo su HEU en la primera cumbre de seguridad nuclear, desarrollada en Washington en 2010, es «un recordatorio vívido de que cuanto más de este material aseguremos, nuestros países serán más seguros».
«Si eso no hubiera pasado, esos materiales peligrosos seguirían allí ahora», destacó Obama en una rueda de prensa. «Y la difícil situación que estamos afrontando en Ucrania ahora tendría otro nivel de preocupación».
Al igual que el plutonio, el uranio puede ser usado para alimentar plantas nucleares pero también provee el núcleo fisible de una bomba si es altamente refinado.
«Instamos a los estados a minimizar sus reservas de uranio enriquecido y mantener sus reservas de plutonio a niveles mínimos, ambos coherentes con los requerimientos a nivel nacional», dijo el comunicado, que fue más allá en relación con la cumbre anterior, realizada en Seúl en 2012.
La cuarta cumbre se celebrará en Chicago en 2016. El proceso comenzó en 2010 en Washington.
Analistas consideran que los grupos extremistas podrían teóricamente construir una bomba nuclear básica pero mortífera si tuvieran el dinero, el conocimiento técnico y los materiales necesarios.
La obtención de material nuclear con capacidad para componer un arma -HEU o plutonio- supone el mayor desafío para los grupos extremistas, por lo que debe permanecer seguro en almacenes, dicen.
Agencias