Desvalijamiento de vehículos y robos a mano armada sufren residentes de esta zona del municipio Sucre del estado Miranda, quienes viven un toque de queda no declarado por culpa del hampa
“Esta mañana me robaron la cartera. Era un sujeto en una moto que vino y me la arrancó de las manos”, narró una habitante de la urbanización Horizonte, ubicada en la Av. Rómulo Gallegos del municipio Sucre del estado Miranda. “Se llevaron las tarjetas del banco, mi cédula y hasta la llaves de mi casa. Ahora tengo que llamar al cerrajero y cambiar las cerraduras antes de que se metan en mi casa”.
Testimonios como este que se repiten a lo largo del sector, azotado por robos y atracos. Responsabilizan a la poca presencia de los entes de seguridad de la Policía Municipal de Sucre, Policía Nacional Bolivariana (PNB) y Policía del Estado Miranda del repunte en la actividad delictiva.
“Aquí nunca pasan ni Polisucre, ni la PNB, ni Polimiranda, ni nada”, dijo un trabajador de la zona. “El alcalde (del municipio Sucre, Carlos Ocariz), manda cuatro oficiales en moto de vez en cuando, pero no hacen la gran cosa”, agregó.
“En vez de estar reprimiendo a los estudiantes, deberían es reprimir a los malandros”, aseveró un comerciante de la localidad, detallando que a causa de la acción de los antisociales se han visto obligados a cerrar sus establecimientos apenas oscurece. “A las 6pm ya es de noche y no se puede andar por estas calles. Aquí la inseguridad galopa rampante a lo largo de la Av. Rómulo Gallegos. Le han llegado a arrebatar las bolsas del mercado a señoras mayores”.
Recuento
El pasado domingo se produjeron tres asaltos en el sector Horizonte: en primer lugar le arrebataron sus pertenencias a un pasajero de una unidad de transporte público. “Aquí debe haber entre cinco y seis arrebatones en la calle cada día”, aseveró una vecina de la localidad.
Cerca de mediodía, dos antisociales robaron una panadería de los alrededores a mano armada. “Uno se quedó en la puerta a vigilar, mientras que el otro entró, le apuntó a las cajeras y se llevó el dinero de las registradoras”, explicó uno de sus trabajadores.
Esa misma tarde, en una pizzería de colindante se perpetró un atraco. “Cerraron la santamaría y, a punta de pistola, le quitaron sus pertenencias a los clientes que estaban en el lugar y luego se llevaron las ganancias de la semana”, según lo dicho por un vecino de la zona.
Las líneas de transportistas no están a salvo de la delincuencia, según expuso un conductor de una cooperativa de taxistas que hacen vida en la Rómulo Gallegos: “La semana pasada tres sujetos, que salieron de una camioneta Terios blanca, todos armados, se robaron dos carros de la línea. Uno apareció por Parque Guatopo desvalijado y el otro todavía lo están buscando”
“Solo vienen quince y último”
A principios de año, los habitantes de Horizonte pidieron el retiro de un puesto de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), pues según ellos, los efectivos castrenses “matraqueaban” a los comerciantes del sector.
“Sí, ellos venían y pedían que les regaláramos que si un café, que si un almuerzo, y uno se lo daba”, explicó un comerciante del sector. “Nunca llegaron a pedir plata, pero la comunidad se cansó de ello y pidieron que los sacaran y ya no volvieron a venir”.
Según los afectados, esa misma situación se repite con efectivos de la Policía del Municipio Sucre. “Ellos solo vienen quince y último para pedirnos vacuna”, afirmó un comerciante de la zona. “Ya sabes cómo es la policía. Los malandros nos roban a nosotros y ellos les roban a los malandros”.
“Ni en nuestra casa”
Una de las modalidades de robo “favorita” de los antisociales es el llamar a los intercomunicadores de los edificios de Horizonte, o esperar a que alguien abra las puertas eléctricas, para luego forzar su entrada en los apartamentos para posteriormente desvalijarlos. “A veces se cuelan en los estacionamientos por la noche y le sacan las baterías a los carros para revenderlos. Uno ya no puede estar seguro ni en nuestra casa”, dijo un vecino de la comunidad.
LaVoz / Luís Guillermo Valera