De acuerdo a lo informado por el secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad Democrática, Ramón Guillermo Aveledo, gracias a la mediación de Unasur ambas partes aceptaron “un testigo de buena fe”, que sería un representante de la Santa Sede “para que nos ayude con su facilitación en este difícil camino que estamos por comenzar»
El gobierno de Nicolás Maduro y la opositora Mesa de Unidad Democrática (MUD) acordaron este martes entablar en próximas horas un diálogo con el acompañamiento de la Unasur y el Vaticano tras dos meses de protestas antigubernamentales que dejan en Venezuela 39 muertos.
«Hay unos acuerdos que hemos alcanzado, uno se refiere a la decisión de dialogar en términos mutuamente respetuosos y de igualdad, y de hacerlo frente a todo el país», dijo a la prensa el secretario ejecutivo de la MUD, Ramón Guillermo Aveledo, tras celebrar una «reunión preparatoria» con una delegación del gobierno encabezada por Maduro.
Este encuentro, sin precedentes en el gobierno de Maduro, fue realizado en la sede de la cancillería venezolana gracias a los buenos oficios de una delegación de cancilleres de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), que realiza su segunda visita a Venezuela en menos de un mes en un esfuerzo por propiciar un diálogo.
«Aspiramos a que en las próximas horas se dé ya la reunión formal que será pública y que los venezolanos podrán también compartir y ver», indicó de su lado el vicepresidente Jorge Arreaza, quien también participó en la reunión que duró casi cuatro horas y a la que también asistieron cancilleres de Unasur.
Maduro estuvo presente en este primer encuentro con la oposición, descrito como «reunión preparatoria» por la Unasur, pero se retiró de la cancillería sin dar declaraciones a la prensa.
Arreaza y Aveledo explicaron que también pactaron que el diálogo cuente con la figura de «facilitadores» representados por los cancilleres de Brasil, Luiz Alberto Figueiredo; de Colombia, María Angela Holguín, y de Ecuador, Ricardo Patiño, y un representante del Vaticano.
Aveledo señaló que el representante del Vaticano podría ser su secretario de Estado, Pietro Parolin, mientras que Arreaza mencionó al nuncio aspostólico en Venezuela.
En Washington, el secretario de Estado estadounidenses, John Kerry, expresó ante el comité de Asuntos Exteriores del Senado su respaldo al trabajo de acompañamiento de la Unasur en Venezuela.
«Apoyamos mucho los esfuerzos de mediación de un tercero dirigidos a tratar de parar la violencia y ver si se logra un diálogo honesto» entre oposición y gobierno, dijo Kerry.
Oposición dividida
Sectores de la oposición, principalmente del ala radical de la MUD, reaccionaron divididos al anuncio de entablar un diálogo con el gobierno de Maduro.
• Voluntad Popular, que forma parte de la MUD, emitió un comunicado en el que advierte que no avaló la participación de la coalición en la «reunión preparatoria» con el gobierno y que rechaza un diálogo toda vez que no se han cumplido las condiciones planteadas por opositores, entre ellas la liberación de López y de los dos alcaldes destituidos, además de otros detenidos que considera «presos políticos».
«Ratificamos que en Voluntad Popular no creemos en un ‘diálogo’ donde el régimen solo plantea un show político utilizando a los cancilleres de la Unasur como interlocutores», señaló el comunicado.
• El gobernador de Miranda, Henrique Capriles, excandidato presidencial de la MUD derrotado por Maduro por una diferencia de 1,49 puntos porcentuales, también se refirió a un diálogo con el gobierno al subrayar que aunque se dé un acercamiento, persistirán los problemas que motivaron las protestas.
«¿Dialogar significa renunciar a principios? ¿Quién dijo que diálogo significa renunciar a que nuestro pueblo siga reclamando sus derechos? El pueblo tiene todo el derecho de protestar por los miles de problemas sin solución en nuestro país. Nadie le puede quitar su derecho», escribió Capriles en Twitter en momentos en que se realizaba la reunión.
• Antonio Ledezma, alcalde opositor de la Gran Caracas, advirtió vía Twitter que «mientras haya estudiantes detenidos, presos políticos, represión, invasión cubana y secuestro de instituciones, el diálogo no será real».
AFP