El también periodista Luis Pinto, contó que no alcanzó a ver cuando se llevaban a su hija. Tres delincuentes armados y encapuchados que presuntamente bajaron de vehículo Chevy de color azul, la sometieron junto a las personas que la acompañaban, pero solo se la llevaron a ella
Este lunes se cumplió un día del secuestro de Nairobi Pinto, jefa de corresponsalías de Globovisión y hasta la fecha no habían existido ninguna llamada por parte de los plagiarios que se la llevaron de las puertas de su residencia, en la calle La Colina, en Los Chaguaramos.
Su padre, Luis Pinto, quien también es comunicador social, decidió expresar ante los medios, su preocupación por este hecho y para aclarar a los secuestradores que no son una familia que cuente con bienes de dinero, ante la suposición de que pudiera tratarse de un secuestro.
Pinto recordó que a las 4:30 de la tarde del domingo, su hija regresaba de hacer unas compras con unos amigos. Eran cuatro personas que la acompañaban, en una camioneta y un vehículo particular.
Dijo que Nairobi Pinto tenía pensado dejar el mercado y seguir con sus amigos. Como de costumbre llamó al apartamento para pedirles que bajaran por las bolsas. Primero salió su hermano y tras él su padre.
Contó que no alcanzó a ver cuando se llevaban a su hija. Tres delincuentes armados y encapuchados que presuntamente bajaron de vehículo Chevy de color azul, la sometieron junto a las personas que la acompañaban, pero solo se la llevaron a ella.
A su padre, también lo apuntó uno de los sujetos pero como estaba frente a la reja del edificio Las Brisas, no logró ver el momento en que la subían al carro para llevársela secuestrada. “Todo ocurrió muy rápido, si se pudiera decir en cuestión de segundos”, comentó.
Nairibi Pinto trabaja desde hace un año trabajando en Globovisión . Durante cinco años había trabajado en Canal I. Está cursando el 4to año de Derecho en la UCV. Es soltera y reside con sus padres en Los Chaguaramos.
Luis Pinto manifestó que su único desea era el de transmitir su angustia a la opinión pública, al no tener noticias del paradero de su hija. Dijo que no habían recibido ningún tipo de amenazas y que su hija no tenía problemas. “No tenemos fortunas, somos periodistas, personas trabajadoras. Siempre escuché de casos como este pero nunca imagine lo que se podía sentir como padre, madre, como hermano”, agregó.
Pidió “de todo corazón” a los secuestradores que no le hagan daño. “Confío en Dios Todopoderoso ante esta situación en la que te sientes impotente que nos ayude y a los plagiarios que no la devuelvan. Apeló a cualquier sensibilidad humana que tengan. Si es posible que valoren que somos periodistas que tratamos de lograr el bienestar de todas las personas sin distinto de clase social o religión”, indicó.
La jefa de corresponsalía de Globovisión es integrante de la Juventud Católica de Petare. Es devota a la Virgen María y muy avocada al trabajo social desde el ámbito religioso. Ha participado en diversas obras de misericordia para ayudar con ropa y comida a sectores desprotegidos en Caracas.
AA