El Centro Carter emitió un comunicado este jueves sobre la mesa de diálogo que se establecerá en el país entre representantes del Gobierno y la oposición venezolana. La organización asegura que “la comunicación, en un marco de respeto y transparencia, y con la facilitación de una tercera parte, constituye un camino apropiado para comenzar a abordar la crisis actual”.
En su comunicado, el Centro Carter aplaude los esfuerzos para abrir un canal de comunicación entre el gobierno y los sectores de la oposición venezolana facilitados por el grupo de cancilleres de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y el Vaticano. La comunicación, en un marco de respeto y transparencia, y con la facilitación de una tercera parte, constituye un camino apropiado para comenzar a abordar la crisis actual y los problemas subyacentes que dividen a la sociedad venezolana. Sin acercamientos entre las partes, Venezuela corre el riesgo de una escalada de violencia e ingobernabilidad de consecuencias impredecibles.
«Un primer paso crucial, por parte del gobierno, para la creación de una base sólida que asegure el éxito de las conversaciones, es garantizar la vigencia de los derechos constitucionales individuales, incluidos los derechos al debido proceso de los estudiantes y líderes políticos detenidos o removidos de cargos electos por votación popular, así como el inicio de las investigaciones sobre alegatos de violaciones de los derechos humanos cometidos por fuerzas públicas en los últimos dos meses. El reconocimiento mutuo de la legitimidad de los actores, y de las ideas políticas en contienda, constituye igualmente una base importante para llegar a acuerdos», señala la organización fundada en 1982 por el expresidente de EE. UU. Jimmy Carter
Señalan que «un conjunto de acuerdos mínimos que resulten de las conversaciones puede dar inicio al proceso de recuperación de la confianza en las instituciones públicas y, con ello, al proceso de sanación de las heridas sociales producto de los enfrentamientos. La formación de una comisión de la verdad independiente, que investigue las muertes que han afectado a todas las partes, puede dar respuestas a las familias en duelo y sugerir los mejores medios para prevenir nuevos casos de violencia».