El general Rodolfo Palomino, director de la policía nacional, aseguró que en Colombia no se presentaba un decomiso tan grande desde al menos 2005, cuando en mayo de aquel año las autoridades decomisaron en dos días un total de 15,1 toneladas del alcaloide en el puerto de Tumaco, sobre la costa del Pacífico
CARTAGENA. La policía colombiana reveló el jueves que un contenedor de exportación de piña en conserva o en almíbar donde fue hallado un enorme cargamento de siete toneladas de cocaína iba dirigido al puerto holandés de Rotterdam, en un alijo que pertenecería a distintos grupos de narcos colombianos.
La droga, dividida en unos 6.900 paquetes envueltos en papel marrón claro y negro y por encima otra capa de plástico transparente, llevaba en cada «panela» o bloque de droga un logo o marca, explicó en la jornada a los reporteros el general Rodolfo Palomino, director de la policía nacional, al mostrar la cocaína en la sede policial antinarcóticos de esta ciudad del Caribe colombiano y a unos 650 kilómetros al norte de Bogotá.
Entre las marcas estaba el dibujo de una moto y escrito en rojo al lado el nombre de la marca Yamaha y otros con el logo de la fabricantes de autos KIA, lo que hace suponer, dijo Palomino, que se trataba de un cargamento acopiado por distintos grupos, entre ellos el de la banda «los Urabeños», integrada por ex paramilitares, narcos y criminales comunes, pero aún se investiga qué otros participaron, dijo el oficial.
Junto con la marca de autos, los narcotraficantes también usaron el número 800 que son «las mismas señas utilizada por los Urabeños en un cargamento de 2 toneladas de cocaína, descubierto hace 15 días por la Policía Nacional en (el puerto del oeste del país) Buenaventura…así que los indicios determinarían la responsabilidad de la banda criminal en este nuevo hallazgo en Cartagena», indicó la policía en un comunicado.
Palomino aseguró que la droga fue hallada el martes por la tarde al revisar cinco contenedores en el puerto de Cartagena y en uno de ellos estaban las cajas con los frascos de piña en almíbar, pero al abrir otras –al menos 450 cajas– se encontraron con que escondían cada una por lo menos 20 paquetes de droga y ahí comenzó a sacarse toda la mercancía y pesar los paquetes culminado la víspera con el resultado de las siete toneladas.
La revisión de los contenedores era precisamente porque desde hace cuatro meses tenían pistas de que saldría un gran cargamento, añadió.
El embarque de aparente fruta saldría en breve para el puerto holandés de Rotterdam, donde la droga tendría un valor de al menos 250 millones de dólares, dijo Palomino. Aún investigan si la empresa exportadora, que no identificó, realmente existe o es una empresa fachada.
También, dijo el jefe policial, están averiguando a lo largo de cuánto tiempo y desde qué vías del país se pudo transportar la droga en diferentes remesas hasta acumular las siete toneladas. Dijo que con seguridad durante el transporte y el ingreso de la droga al puerto hubo «la compra de muchos favores».
Aunque no dijo si ya contactaron directamente a la policía holandesa, Palomino aseguró que mantienen permanente contacto con sus colegas antidrogas en 27 distintos países.
En lo que va de año y con este decomiso en Cartagena, aseguró Palomino, la policía se ha incautado de 30 toneladas de cocaína, al menos 13 de ellas en puertos. En 2013 la policía antidrogas se incautó de 109,7 toneladas de cocaína, de acuerdo con las autoridades antinarcóticos.
Pedro Mendoza / AP