Con la luz del amanecer quedó el domingo al desnudo la destrucción provocada por el siniestro, el peor que ha enfrentado la ciudad declarada patrimonio de la humanidad
Un gigantesco incendio dejó al menos 16 muertos y más de 500 viviendas destruidas en el puerto chileno de Valparaíso, mientras los bomberos luchaban por terminar de extinguir el siniestro que arrasó con cerros de la ciudad y obligó a evacuar a miles de personas.
El incendio se desató el sábado por la noche en una zona boscosa en las afueras del puerto, pero las inusuales ráfagas de viento propagaron las llamas a seis cerros que rodean la ciudad y estaban sembrados de casas.
«Carabineros ha actualizado la cifra de personas fallecidas, aumentando a 16», dijo la Oficina Nacional de Emergencias (Onemi).
La presidenta Michelle Bachelet declaró la zona en estado de catástrofe y viajó para supervisar la situación, reseñó la agencia Reuters.
Unos 1.200 bomberos y centenares de brigadistas de rescate trabajaban sin tregua para apagar los últimos focos del inmenso incendio, que con sus llamas de 20 metros de altura devoró unas 800 hectáreas.
Unas 5.000 personas resultaron damnificadas con los incendios. Unas 10.000 personas fueron evacuadas hacia albegues o casas de familiares, mientras varias zonas no tenían electricidad ni servicio de agua en Valparaíso, ubicada a poco más de 100 kilómetros al oeste de la capital Santiago.
«El siniestro no está extinguido completamente. Hay focos que siguen activos. Esto es lo más catastrófico que he vivido en Valparaíso. Es difícil saber si el incendio está controlado», dijo el jefe del Gobierno regional en Valparaíso, Ricardo Bravo.
• DESOLADOR PANORAMA
Decenas de columnas de humo se levantaban sobre los cerros de la ciudad, en donde centenares de casas quedaron convertidas en cenizas y muchas personas llorando removían los escombros de sus hogares con vanas esperanzas de poder rescatar algunas pertenencias.
«Ojalá, esperamos no encontrar mas víctimas fatales. Hay muchas mascotas que fueron afectadas por el siniestro. Estamos buscando entre los escombros», dijo el coronel de la policía, Fernando Bywaters.
El casco antiguo de la ciudad, zona declarada patrimonio de la humanidad por la Unesco, el puerto y la sede del Congreso se encontraban fuera de peligro.
«Está todo quemado arriba, la casa de mi hermana también fue consumida por el fuego», dijo el sábado por la noche con angustia Rosa Guzmán, una residente que evacuó su casa.
Las aeronaves especializadas en apagar incendios no pudieron operar el sábado por la noche por las malas condiciones climatológicas, pero el domingo 14 helicópteros y seis aviones trabajaban intensamente combatiendo las llamas.
El pronóstico del clima para el domingo auguraba altas temperaturas y fuerte viento en Valparaíso, una combinación fatal para los bomberos que no descartan nuevos rebrotes de focos que ya habían sido controlados.
Se habilitaron cuatro albergues para las miles de personas damnificadas, mientras ya comenzaban las labores de recolección y donaciones de insumos básicos para asistirlos.
Cifra de víctimas podría aumentar
La presidenta Michelle Bachelet dijo que la cifra de muertos podría aumentar con las horas y precisó que son 10.000 las personas evacuadas.
La mandataria informó además que hay 2.000 efectivos resguardando el orden y la seguridad y 1.250 bomberos en el combate del incendio e indicó que hasta el momento son 500 las casas destruidas pero admitió que la cifra podría aumentar una vez que se realice el catastro en terreno.
Por su parte, el ministro del Interior Rodrigo Peñailillo informó que hubo un rebrote del incendio en dos de los seis cerros comprometidos y que personal policial se encontraba en la zona trabajando para evitar la propagación del fuego.
En tanto, el director del Servicio Médico Legal, doctor Patricio Bustos, dijo que existen dificultades para identificar a las víctimas debido a que se encuentran carbonizadas y adelantó que la identificación se realizará mediante muestras de ADN.
AP